El sargento del ejército norteamericano Donald Buswell corre el riesgo de ser degradado y juzgado por una corte marcial debido a la redacción de mensajes «desleales». Sin embargo, en la guerra de Irak, el sargento Buswell fue herido por lo que recibió la Purple Heart, prestigiosa condecoración militar (foto: entrega de la medalla). Desde entonces era analista militar en Fort Sam Houston, en Texas. ¿Su delito? Haber enviado un e-mail en el que se interrogaba acerca de la versión oficial sobre los atentados del 11 de septiembre de 2001. En una respuesta a un spam relacionado con el 11 de septiembre, el sargento Buswell cuestionó la versión oficial acerca del atentado contra el Pentágono y de lo que sucedió con el Vuelo 93 que se estrelló en Pennsylvania. Consideraba necesario pedir la creación de una nueva comisión investigadora independiente dispuesta a examinar todas las opciones posibles sobre los acontecimientos de aquel día. Al día siguiente, Donald Buswell descubría que ya no tenía acceso a su oficina y que se le había iniciado una investigación. Interrogado sobre este aspecto por la revista en línea Iconoclast Online, el coronel Green y le mayor Escobar, quienes iniciaron el procedimiento disciplinario, no comentaron su decisión.
En el correo enviado por el sargento Buswell no se mencionaba ningún tipo de complicidad por parte del ejército norteamericano en los atentados. Sin embargo, la simple mención de dudas sobre la versión oficial de los atentados del 11 de septiembre se ve hoy como traición e incluso la presentación de los fracasos de la Coalición en Irak se considera antipatriótica. Así, el 29 de agosto de 2006, Donald Rumsfeld criticó a la prensa estadounidense sin embargo acostumbrada a la autocensura, considerada demasiado derrotista.
Manténgase en contacto
Síganos en las redes sociales
Subscribe to weekly newsletter