El diario conservador canadiense The Globe and Mail revela en su edición del 1º de diciembre de 2006 que desde hace 17 meses Estados Unidos viene trabajando en la formación de una guardia pretoriana encargada de defender el gobierno que Washington logró entronizar en el Líbano aprovechando la coyuntura creada por el asesinato de Rafik Hariri.

Según Ahmad Fatfat, ministro del Interior interino, el primer ministro Siniora convenció a Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos, Kuwait y Egipto para que contribuyeran a la constitución de dicha fuerza. Para ello, hizo valer el hecho de que él mismo es sunnita y agitó la amenaza de un Líbano gobernado por una coalición bajo el control de los chiítas.

Después de la victoria de Hamas en las elecciones legislativas palestinas, Estados Unidos también creó una guardia pretoriana en Palestina para el presidente Mahmud Abbas, situación que estuvo a punto de provocar una guerra civil.