Este será el primer acercamiento a lo que deben ser los principios organizativos del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) propuesto por el Jefe de Estado como garantía de la profundización del proceso de cambios que encabeza desde 1999.

El proyecto busca unificar a los miembros de más de 20 partidos y agrupaciones que respaldan la propuesta de emprender el camino socialista de desarrollo en el país sudamericano durante el mandato presidencial 2007-2013.

Aunque la convocatoria fue aceptada por las fuerzas de izquierda, varios partidos presentaron posteriormente objeciones sobre la conveniencia de su desmantelamiento inmediato para dar paso al PSUV.

Quienes tienen reservas estimaron que primero deben conocerse los lineamientos e ideología de la nueva organización, y favorecen un proceso por etapas, con la conformación primero de un frente de partidos, sin perder su autonomía.

La comisión promotora se reunió durante los días pasados con representantes de esas y otras agrupaciones en un ambiente de reserva sobre lo tratado para facilitar el proceso, de acuerdo con miembros de ese grupo.

En opinión de Roberto Hernández, miembro de la comisión y segundo vicepresidente de la Asamblea Nacional, las pocas diferencias planteadas por algunas organizaciones políticas y sociales son perfectamente superables.

Al hablar en una reunión juvenil, Hernández, miembro del Partido Comunista, opinó que las entrevistas realizadas "ponen en relieve que son muchísimas las coincidencias existentes entre los partidos políticos y los movimientos sociales".

Según trascendidos esos encuentros se centran en consultas sobre conceptos para la formación del PSUV, incluyendo su estructura organizativa.

El propósito es conocer los criterios de las diversas organizaciones, incluyendo aquellas que han decidido no disolverse por el momento.

Del encuentro con Chávez esta semana, una primera parada en el camino de formación de la organización, deberán conocerse adelantos sobre los diferentes criterios expresados por los partidos.

El debate, que demuestra lo complicado del proceso es visto de dos formas diferentes, pues mientras para algunos políticos de derecha representa un fracaso del llamado a la unidad, otros lo ven como expresión de un lógico intercambio de ideas.

Con sobresaltos, hasta cierto punto lógicos en el contexto político venezolano con larga tradición de fraccionamientos, lo cierto es que el proceso de integración del PSUV avanza, un proyecto que deberá cambiar el panorama político local.

# Prensa Latina (Cuba)