Expropiación de equipos en las radios comunitarias por supuestas faltas en el campo legal, negación de las pautas publicitarias para las revistas o el cierre de espacios culturales son algunos ejemplos de las miles de maniobras que hacen los que se sienten “dueños de la verdad” para disfrazar la censura, a no ser de que transes con un monstruo grande que pise fuerte y te banque la parada, o hagas eco de los supuestos progresos que promociona el gobierno de turno.

¿Y sino?

Otro gancho, derechazo y a la lona.

Pero algunos se olvidan que a los golpes se entrena a la fiera y en el momento menos pensado te clava los colmillos.

Hoy Despierta Buenos Aires sigue dando y recibiendo, pero no se calla. La otra comunicación ya está en marcha, por otros caminos (tal vez más largos), pero que llegan a romper con el círculo de la desinformación del que sólo forman parte los mega ricos medios de comunicación.

Por eso es que Despierta Buenos Aires forma parte de la Red de Redes, creada en el Primer Congreso Mundial de Comunicación -organizado por la UTPBA- y profundizado en el Segundo, en noviembre de 2005.

En nuestra página (www.despiertabsas.com.ar) vas a seguir encontrando la otra cara de la cultura, la que nos quieren esconder pero no pueden; son miles y miles de nuevas voces que se hacen eco, y vamos por más.

Entrevistas, notas de opinión, agenda cultural, recomendados, música, cuentos, poesía y lo que a vos se te ocurra y quieras proponer; Despierta Buenos Aires no le hace asco a los cambios y está abierta a la participación de quienes tengan algo para decir.

(*) Periodista. Responsable de Despierta Buenos Aires.