El presidente George W. Bush enviará la semana próxima al Congreso de su país una iniciativa para aprobar la venta de bombas guiadas por satélite, aviones cazabombarderos y embarcaciones navales nuevas en 10 años, según una portavoz del Departamento de Defensa, Rebecca Goodrich Hinton, quien confirmó versiones publicadas este sábado por los diarios The Washington Post y The New York Times .

El Times señaló que el plan para dotar de armas a Arabia Saudita está atado a tres condiciones: evitar que el arsenal represente una amenaza para Israel, disuadir el poder militar de Irán y apoyar acciones de Washington en Irak.

Antes de la confirmación de las intenciones de Estados Unidos, el Times publicó informaciones que ponían en evidencia la escasa colaboración de la monarquía saudiárabe con Washington en el proceso iraquí.

Con base en fuentes gubernamentales estadunidenses, el rotativo neoyorquino publicó el jueves que una misión de alto nivel de la administración de George W. Bush visitará Riad la semana próxima para cuestionar a la familia real saudí sobre acciones que supuestamente minan al gobierno de Irak.

La delegación estadounidense estará encabezada por los secretarios de Estado, Condoleezza Rice, y de Defensa, Robert Gates, quienes expresarán al gobierno saudiárabe su "sospecha" de que Riad financia a grupos iraquíes sunitas que se oponen al gobierno del chiíta Nuri Maliki.

Asimismo, presentarán información obtenida por las fuerzas armadas estadunidenses de que la mitad de los 60 a 80 combatientes extranjeros que se infiltran mensualmente a Irak lo hacen a través de la porosa y extensa frontera norte de Arabia Saudita, en pleno desierto.

Arabia Saudita es uno de los mayores productores de petróleo en el mundo y también uno de los países mejor armados de la región. BAE Systems, de Gran Bretaña, vendió recientemente a Riad equipos militares que inclusive fueron puestos bajo observación de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, a raíz de que hubo versiones sobre presuntos sobornos.

Para atenuar la preocupación de legisladores estadunidenses que podrían oponerse a la aprobación del paquete armamentista para Arabia Saudita y sus cinco vecinos del golfo Pérsico (Bahrein, Kuwait, Omán, Qatar y Emiratos Arabes Unidos), el ejecutivo tiene previsto ofrecer a Israel más de 30 mil millones de dólares en ayuda militar en los próximos 10 años.

También con el propósito de proteger a Tel Aviv, la venta de armas a Riad estaría condicionada a restricciones sobre el rango, tamaño y ubicación de las bombas guiadas por satélite, según el Times . El Pentágono también pedirá un compromiso para que no se almacenen las armas en bases aéreas cercanas a territorio israelí, agregó el periódico.

# Rebelion.org