“Desde la TV de su casa, en el canal 3 de Cuartel V, prepárese para ver algo realmente nuevo. Todas las noticias del barrio, el entretenimiento, el humor y el deporte, para toda la familia, para los pibes, los jóvenes y para los más grandes también”.

 Eduardo, ¿cómo está conformado el plurimedio?

 Está integrado por nuestra radio FM La Posta que transmite las 24 horas y que cuenta con un equipo interesante de corresponsales barriales; el diario La Posta Regional, que sale cada 20 días y que está llegando a una enorme cantidad de barrios; los eventos callejeros que se realizan en lugares públicos y ahora sumamos el canal de televisión.

Este plurimedio tiene un consejo editorial que está formado por organizaciones sociales que son las que van a conducir la participación de los vecinos y que se tratará en tres asambleas anuales, para luego debatir las prioridades que nos interesan, y de ahí lo que se priorizará en la difusión.

 ¿Cómo diferenciamos un plurimedio de un multimedio?

 El multimedia está ligado a un grupo empresarial y que responde a intereses de un grupo minoritario. Un solo patrón baja su línea y todos deben reproducirla. En cambio, el plurimedio es distinto. Está dirigido por la gente que se pone de acuerdo en un objetivo en común. Para esto se están capacitando un grupo de comunicadores (periodistas, fotógrafos, corresponsales barriales) que todos los días retratan la realidad de la gente, lo que sucede en el barrio y no se publica en los medios masivos de comunicación. En el canal por ahora vamos a tener 4 horas diarias de programación, donde habrá un noticiero y pasaremos una película

 ¿Será un canal comunitario donde se puedan expresen los vecinos?

 Exacto. La experiencia que estamos desarrollando es clave, es fundamental para la construcción de unidad popular. El desarrollo de las herramientas de comunicación fue el medio estratégico para probar que la verdadera derrota que teníamos entre los sectores populares tenía que ver con que se habían roto lazos de comunicación. Nuestro proyecto tuvo que ver con eso. Van pasando los años y vamos probando que no es una hipótesis herrada. Que vamos caminando bien, porque a medida que redoblamos la apuesta más fuerza y más poder vamos construyendo”

La participación de los vecinos

Alina Sosa es integrante de este plurimedio. Empezó colaborando con “La Posta Regional”, el periódico de la zona. Consultada sobre este emprendimiento nos dijo: “Aquí participan varias organizaciones barriales. Este proyecto del canal de televisión tiene que ver más que nada con un proceso de apropiación, de espacios de participación de los vecinos, de los jóvenes, de los más chicos”.

 ¿Cómo se da esa participación?

 El proceso es muy largo. Culturalmente el vecino tiende, en los últimos años, a no participar, a no ejercer sus derechos o su voz. Entonces, un medio de comunicación comunitario, principalmente debería poner al servicio este espacio de comunicación para que los vecinos puedan expresarse y puedan construir poco a poco redes sociales o un tejido social más fuerte y no tan complicado.

 ¿Cuáles deben ser las prioridades de ese medio de comunicación?

 Un medio de comunicación comunitaria debe posibilitar que el vecino pueda expresar su voz, su ciudadanía y que pueda luchar por el cumplimiento de sus derechos. La idea del canal comunitario surge no como una iniciativa comercial, sino de una necesidad de la red de organizaciones comunitarias. Porque la problemática de un barrio es común a la de muchos otros barrios y tiene que ver con la gestión pública.

 ¿Estás de acuerdo con que las ideas que no se organizan no luchan?

 Totalmente. La organización es la base de todo para poder poner en común problemáticas que surgen día a día entre los vecinos, como la falta de cloacas y asfaltos, una salita de primeros auxilios mal equipada. Y esto tiene que ver con una nueva lógica, que no sea individualista, que podamos juntarnos, charlar, divertirnos, porque el debate forma parte del consenso y permite organizarse para la lucha (ANC-UTPBA).

(*) El Culebrón Timbal es una organización cultural barrial