En el encuentro que se desarrollará en el microestadio del club Ferrocarril Oeste, en el barrio porteño de Caballito, también reclamará por “Libertad y Democracia Sindical. Personería Gremial para la CTA”.

El acto fue anunciado durante una conferencia de prensa realizada el pasado lunes 19, en la que participaron Hugo Yasky (secretario General de la CTA), Carlos Séller (Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos) y Jorge Sisca (ApyME).

“Vamos a presentar nuestra propuesta para que el Pacto Social al que convoque el Gobierno sea realmente la posibilidad de discutir la distribución de la riqueza en la Argentina, que es mucho más que discutir precios y salarios. Es discutir un nuevo modelo distributivo y un nuevo modelo productivo”, sostuvo Yasky, según un informe de la agencia ACTA.

El titular de la CTA demandó que hay que “consolidar una práctica de libertad y democracia sindical. Por eso, dentro de este planteo, incorporamos también la necesidad de que definitivamente se resuelva el pedido de personería gremial para la CTA”.

En referencia al denominado Pacto Social que impulsa el Gobierno nacional, Yasky aseveró: “Si es solamente acuerdos de precios y salarios, sobre todo, si es un acuerdo corporativo entre cúpulas que representan a un solo sector de los empresarios, o a un solo sector de los trabajadores, no sirve”.

Por su parte, Heller señaló que “hace falta una reforma al sistema financiero. Hace falta una nueva ley de entidades financieras que defina el carácter del servicio financiero. La ley de entidades financieras en la Argentina es la ley de la dictadura militar, de Videla y Martínez de Hoz y sigue vigente. Debería ser cambiada porque es uno de los pilares en los que se apoyó el modelo que se llevó adelante a partir de la dictadura”.

“En el modelo de sociedad que nosotros imaginamos, la entidad financiera debe ser vista como un servicio público. Y si es un servicio público, debe ser regulada. Crear reglas que determinen, por ejemplo, qué porción de la capacidad prestable de los bancos debe ir a incentivar el consumo y qué porción debe ir a apoyar el desarrollo de la actividad productiva y en especial el financiamiento de las pequeñas y medianas empresas”, agregó.

También manifestó que “un pequeño número de empresas tiene alrededor del 25 o 30% de todo el crédito que da el sistema financiero, que son unas 110 empresas. Entonces, en realidad, el sistema reproduce el modelo de concentración económica, lo acentúa y lo facilita, en vez de actuar como un elemento modificador que a través del financiamiento posibilite, por ejemplo, la creación de pequeñas y medianas empresas, el desarrollo de las empresas de la economía social, las cooperativas, las empresas recuperadas”.