Hoy, por ejemplo, desde el periodismo se juzga todo y a todos. Yo no podría juzgar a nadie porque me siento absolutamente imposibilitado, porque yo tengo también mis debilidades y me mandé miles de macanas en mi vida como para ponerme a juzgar a un hombre…, no tengo autoridad.

Eso también tiene que ver con una determinada ética que hoy no está muy clara. Una tiene que ver con la verdad y la otra con el negocio.

El periodismo hoy es un show, y al estar tan vinculado con la televisión y con la farándula, se pierde sentido de la ética.

Los chicos de hoy -algunos- se acostumbran y dicen: “soy un poco famoso, salgo con un par de pibas… gano una buena guita”, en vez de pensar y crecer en la profesión, piensan en ser famosos.

Esa es la gran diferencia con ese periodismo con el cual crecí yo. Esto tiene que ver directamente con los cambios estructurales que sufrió la vida en general en los últimos 20 años.

Ojo, no todo es show. También están los pibes que cobran buena guita por hacer bien su laburo, y los felicito si se hacen respetar en la profesión, lo cual es muy importante. Trabajar y pedir tu plata, tu salario bien ganado.

Tengo muchas diferencias con algunos periodistas, y las mantengo por años, pero, por ejemplo, Araujo, que estaba cómodo en el monopolio de TyC Sports, pidió más dinero, no le dieron y se fue.

Hoy tenemos un gran aliado en Internet, que también tiene sus contras, por ejemplo, la inmediatez o la falta de análisis, pero ayuda. Por ejemplo, a través de Internet me escuchan en algunas partes del mundo.

Igual sostengo una teoría: las nuevas tecnologías, la televisación de todo y el show mediático han alejado a la gente de la lectura. Y eso -la lectura- en el periodismo es fundamental, es lo que más repito: lectura, conocimiento, capacitación.

Es lo único que brinda un mayor vocabulario para expresar mejor y claramente las ideas. La seguridad para expresar una idea te la da la lectura. Cuando vos expresas o improvisas aparece tu bagaje cultural, aparecen tus horas de lectura, tus recursos idiomáticos.

Los pibes tienen que entender eso. Si ayudo con mi tarea a que alguien se acerque a la lectura, estoy hecho. Hay que rescatar la palabra.