Las normativas internacionales en vigor vetan únicamente la instalación de las armas de exterminio en masa en el espacio, recordó el jefe de la diplomacia rusa al intervenir ante la Conferencia de la ONU para el Desarme, en Ginebra.

El nuevo tratado tiene por objetivo eliminar esta laguna legislativa, sentar las condiciones para el futuro uso del espacio extraterrestre, garantizar la preservación del patrimonio espacial, así como potenciar la seguridad universal y el control sobre los armamentos, señaló Lavrov.

Instaladas en el espacio, las armas no serían un instrumento de disuasión sino que podrían generar tensión entre diversos Estados, minarían la confianza recíproca y la cooperación en materia de exploraciones espaciales, dijo.

El ministro manifestó la esperanza de que el anteproyecto redactado por China y Rusia no implique dificultades algunas para hallar una fórmula de compromiso, y que sea posible canalizar esta labor hacia el proceso de negociaciones.

Divulgadas por primera vez en 2007, las propuestas de Moscú y Pekín fueron avaladas por la mayoría de los países a excepción de EEUU que sigue desarrollando una nueva generación de sistemas de defensa antimisil y, de hecho, procura reanimar su programa de Iniciativa de Defensa Estratégica (IDE), un concepto formulado en la década del 80 y bautizado enseguida como programa de "Guerra de las Galaxias".

"Sabemos que EEUU tiene algunas dudas al respecto y esperamos disiparlas cuando pasemos a trabajar con el texto difundido hoy. Prestaremos atención a todas las recomendaciones y a todos los comentarios", aseguró el canciller ruso.

"No podemos admitir que haya armas algunas en el espacio", agregó.

Fuente
RIA Novosti (Rusia)