Dónde está el defensor de la oligarquía y de las políticas asesinas de Bush y Uribe. El silencio lo dice todo, para que no aparezca en los medios de comunicación que tanta bola le paran”, decía una madre de familia contra Jaime Nebot, en una emisora de la capital que en esos momentos convocaba a una marcha por la defensa de la soberanía.

No fue una sola persona la que le recriminó; fueron muchas las que repudiaban el silencio de Nebot, quien callaba al pueblo guayaquileño con la ayuda y complicidad mediática. En los acostumbrados espacios de televisión culpaba al Presidente de la República, Rafael Correa, por las inundaciones en varios recintos de algunas provincias de la Costa. Se dedicó a los coctelitos con los empresarios de la Cámara de Comercio y de la Pequeña Industria de Guayaquil, así como a recorrer las enlodadas calles producto de las inundaciones y a repartir alimentos al puro estilo populista. Cosa similar lo hacía su ‘vecino de barrio’, Nicolás Lapenti, Prefecto del Guayas, quien desde la canoa repartía los productos.

Ni la Prefectura del Guayas, ni las Cámaras de Guayaquil y peor los medios de comunicación, especialmente los de la familia Isaías, como TC, Canal Uno y Gamavisión, convocaron a movilizaciones por la defensa de nuestra Patria por el ataque colombiano como sí lo hicieron para ‘defender’ la seguridad en Guayaquil y la última sobre la autonomía de esta ciudad.

Así lo confirma el analista político Carlos Alvarado, quien indica que las marchas son reforzadas con gente traída desde diversos cantones y provincias cercanas; que participan dirigentes nacionales y provinciales del PSC, las Cámaras de la Producción, hacendados y ganaderos que desfilan a caballo. A estos, según este analista, se suman la denominada Junta Cívica, empleados de los medios de información, un pequeño sector de empleados y funcionarios obligados por las autoridades seccionales, y los empresarios.

“Algo inaudito y cínico es que, cuando realizaron la marca por la seguridad, bajo los letreros que decían estar contra la delincuencia, participaron también elementos del PSC como Franklin Verduga Vélez, quien fuera, entre otras cosas, acusado de atraco y extorsión en la GARITA 3 de la Comisión de Tránsito del Guayas, y quien a su vez es hermano de César Verduga Vélez, prófugo de la justicia, acusado de la ilegal y arbitraria utilización de “gastos reservados” en el gobierno de Fabián Alarcón”, insiste Alvarado.

Para la marcha a favor de las autonomías de Guayaquil, luego de tremenda cobertura de los medios que también callaron la agresión colombiana, Nebot aseveró que “este es el Guayaquil por Guayaquil y el Guayaquil por la patria. Cuando es con Guayaquil, es conmigo y contigo… y contigo, es con todos los guayaquileños y los ecuatorianos. Guayaquileños, madera de guerrero, jamás tengan temor. Hoy como ayer y mañana: un solo puño, un solo corazón, y en ese corazón una sola decisión. Nada ni nadie jamás ofenderá a Guayaquil”, concluyó en su intervención el burgomaestre de Guayaquil que no tuvo esa misma firmeza para convocar a sus seguidores para defender la patria. Los intereses de clase pudieron más que una patria altiva y soberana.