De cara a la Asamblea Constituyente se presenta la oportunidad de realizar cambios importantes en muchos temas que influyen significativamente en la vida de los ecuatorian@s. Uno de esos temas es la seguridad social y particularmente el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, IESS.

No es una discusión de ahora, sino desde hace ya tiempos; una cosa está clara para los trabajadores, los afiliados, jubilados, pensionistas y pueblo en general, y es la innegable necesidad de cambios profundos en la seguridad social que signifiquen sacar de la crisis al IESS, avanzar a la cobertura de miles de trabajadores que no gozan de este derecho, de un manejo honesto de sus bienes y recursos que devenga en el mejoramiento de la calidad y calidez del servicio en todas sus áreas.

El mayor ahorro del país, que no lo posee ningún banco, lo tiene el IESS, es decir los trabajadores con su esfuerzo diario, quienes con creces hemos defendido el derecho a la seguridad social y los recursos del IESS de los gobiernos de turno que lo convirtieron en caja chica, en botín político, más aún, hoy no podríamos hablar de fondos de reserva, cartera de inversiones y del IESS en general, de no ser por la lucha contra las políticas neoliberales con las que la oligarquía pretendió poner sus manos en los dineros de los afiliados y acabar con la seguridad social.

Hoy se habla desde la Asamblea Constituyente de debatir el tema de la Seguridad Social, está de por medio una propuesta de SENPLADES, seriamente cuestionada por las organizaciones de trabajadores, afiliados y jubilados, pero no es la única, están también en manos de los asambleístas las propuestas de varios sectores afiliados, de los campesinos afiliados al seguro social y el Mandato Social de las organizaciones populares.

El debate sobre el tema sería estéril, alejado de la opinión del soberano y por tanto carente de respaldo, si no se toma en cuenta la posición y las propuestas de los principales afectados y legítimos dueños, insistimos: los trabajadores públicos y privados, afiliados, jubilados, pensionistas del IESS, militares y policías afiliados al ISSFA e ISSPOL, a quienes hasta hoy no se está tomando en cuenta, sino la opinión de unos cuantos neoliberales infiltrados en el actual gobierno. Esta es una demanda legítima que hacemos al Presidente de la Asamblea Constituyente Ec. Alberto Acosta y al conjunto de la Asamblea.

Lo que hoy se pretende hacer con la seguridad social y el IESS, en el pasado gobierno de Sixto Durán Ballén ya se consultó al soberano, el pueblo, y este le dijo NO a la privatización de la Seguridad Social y eliminación de la autonomía del IESS, por tanto es el mismo pueblo ecuatoriano quien mayoritariamente debería decir lo contrario, en una consulta popular.