Sus páginas recogen desde el 10 de mayo de 1908 la memoria histórica de estos 100 años de convulsa vida republicana, pues puede afirmarse con seguridad que no hay acontecimiento importante no haya sido recogido en sus ediciones.

Quien quiera conocer profundamente los avatares de la república burguesa y sus luchas, tiene que ir necesariamente a la revista, convertida en tribuna permanente de la batalla contra la temprana corrupción gubernamental, los crímenes políticos como método para eliminar oponentes y el pistolerismo, males que envilecieron durante años la vida política del país.

En sus entregas tuvieron cabida todas las tendencias, en un ejercicio de periodismo singular, el cual permitía, no obstante, prevalecieran las verdades, descubrir latrocinios y denunciar los males envenenadores de la Isla.

Así fue refugio y trinchera en todas las épocas, especialmente de Eduardo Chibás, José Antonio Echeverría y Fidel Castro, siguiendo una tradición iniciada desde la época en que combatió la tiranía de Gerardo Machado.

Su Sección En Cuba, a partir de 1953, luego de la cobertura de primera línea que hizo de los sucesos del ataque al cuartel Moncada, el 26 de julio de ese año, devino lectura obligada para conocer no solo los hechos en sí, sino la atmósfera y acontecimientos que los rodeaban.

Puede afirmarse que fue un periodismo creador de un estilo nuevo, que hacia de la publicación algo diferente, esperada cada semana con ansiedad por la población.

El contenido de sus páginas en las décadas más recientes, después del triunfo popular de enero, va a quedar como una de las fuentes más confiables para conocer el feroz y brutal ataque imperialista contra la Revolución, en especial la guerra económica prolongada, y la hombrada increíble del pueblo cubano para resistir y vencer.

Ella recoge el día a día de la Revolución, sembrando conciencia, criticando y enseñando, en un intercambio permanente con el lector, en el camino infinito del perfeccionamiento.

Bohemia, con su diversidad temática, es una escuela del buen hacer y el buen decir, donde no falta nada para conocer y estar al tanto del mundo en que vivimos, desde una posición militante y comprometida.

En sus páginas vemos pasar en cada número el mundo y sus complejidades, y se ubica el lector en su papel, en un intercambio dinámico. A ella ningún problema le es ajeno y nadie es ajeno a sus páginas.

Bohemia, en la hora de su centenario, ha permanecido fiel al pueblo, que la considera un arma valiosa para continuar librando la batalla ideológica, la batalla por la construcción del socialismo.

Agencia Cubana de Noticias