La actividad se realizó ante un colmado salón del Colegio de Magistrados de ésa ciudad balnearia, cuyo inició lo marcó un sentido homenaje al sociólogo, Nicolás Casullo, a quien se reivindicó por “su incansable labor en defensa de poner el trabajo intelectual al servicio de la sociedad”.

Posteriormente, se proyectó el video producido por la Federación Latinoamericana de Periodista (FELAP), “Terrorismo en tres actos”, que fue ponderado por el público presente.

El periodista e integrante de la Red de la Comunicación-Utpba, Héctor Sosa y doctor en Medicina, Médico Psquiatra y estudioso de los medios, Francisco Berdichevsky, incursionaron- desde miradas plurales-, en la influencia de los monopolios informativos, la creación de nuevas subjetividades, la construcción de ideas y comunicación propia, la manipulación informativa, las industrias culturales, la ley de radiodifusión y la necesidad de abrir un debate amplio en la sociedad sobre el significado de la batalla por las ideas y qué papel juegan los grandes medios consolidación de la mentira organizada.

Con la moderación del panel por parte del docente de TEA Mar del Plata y la presentación del doctor Gustavo Gonzáles Ramella (Carta Abierta Necochea), quien reivindicó éste tipo de encuentros “tan necesarios para visualizar como los medios han pretendido por décadas ser dueños de la realidad”, la charla se enmarcó en un rico debate a partir de las exposiciones de Berdichevsky y Sosa.

“El poder conformado por los microgrupos de concentración del poder económico, son dueños de los grandes medios. Estos grupos construyen la realidad en base a efectos, artefactos de técnica, racionalizaciones, omisiones y una cantidad de subterfugios que son internalizados por nuestras mentes, algunos desde una conciencia precaria, otros desde lo inconsciente [muy particularmente los medios analógico visuales], y de allí al imaginario colectivo sólo hay un paso”, señaló Berdichevsky.

“Imaginario-continuó- que se construye, naturalmente, con elementos ilusorios en mezcla convincente con algunos componentes reales, y que pasa a ser un patrón de pensamiento vivido como construcción individual y como realidad innegable. Ya lo decían unos señores llamados Vigotsky y Leontiev: no solamente interiorizamos lo recibido, sino que además nos apropiamos de esos componentes cognitivo afectivos como parte de nuestra personalidad; y como parte de nuestra identidad y del yo, agregamos nosotros”.

Sosa, subrayó la necesidad de que este tipo de encuentros-de los que la UTPBA viene participando en la provincia de Buenos Aires- son necesarios para que la temática de la comunicación no sea patrimonio corporativo.

“Los medios -dijo- se han encargado de una censura logística para eliminar el tema de sus agendas, pues nos toca una larga tarea por instalarlo, al igual que la educación, la salud y principalmente la distribución de la riqueza”.

“Existe un motor ideológico, una matriz, -a la cual se suman en cadena las empresas monopólicas de cada país-, y ésta produce, elabora y distribuye mentiras perfectamente organizadas desde su casa central: los Estados Unidos”, precisó Sosa.

Ambos panelistas, coincidieron en señalar que el cambo de batalla de las ideas se produce en todos los espacios culturales, y que es importante colocar en el análisis los cambios producidos en Latinoamérica, incluso “poner en debate como en naciones donde los medios trabajaron para el golpe o anular los nuevos cambios constitucionales que alentaban la inclusión social, no pudieron impones sus mentiras”, en referencia a Bolivia, Venezuela, Ecuador, Argentina y Paraguay”.

Finalmente, se reivindicó el rol de los medios de comunicación audiovisuales zonales y la comunicación alternativa que recorre una parte de las rutas informáticas de Internet, “capacitar, educar y hacer visible estos medios es tarea de todos. El imperio, el capitalismo fracasó en su proceso de socialización y allí hay que entrar. Las hendijas existen”, remarcaron.

Sosa, estuvo acompañado por los comunicadores Héctor Quelle, Argentino Lorenzo y Osvaldo Etrea.

El equipo de la Red de la UTPBA continuó su recorrido por otras localidades de la Costa Atlántica.