La querella se realizó cuando la causa que incluye a los responsables directos y autores mediatos del secuestro y asesinato de Marcelo Ariel Gelman, espera desde el año pasado para que se realice el juicio oral.

Marcelo Ariel Gelman (20 años), fue detenido junto con su esposa María Claudia García Iruretagoyena (19 años), embarazada de siete meses, el 24 de agosto de 1976, y fue llevado al centro clandestino de detención Automotores Orletti, ubicado en el barrio porteño de Floresta, que dependía del Servicio de Inteligencia del Estado (SIDE), donde fue torturado y asesinado; posteriormente su cuerpo junto con otros fueron tirados al Canal de San Fernando y luego enterrado como NN en el Cementerio de San Fernando.

Los restos de Marcelo Gelman fueron identificados a fines de 1989 y velados en la sede de la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (UTPBA) en enero de 1990, a pedido de su padre.

“Cuando el cortejo partió, de los balcones cayeron una lluvia de pétalos de rosa. Nunca lo voy a olvidar. Esos pétalos siguen cayendo sobre mi vida”, recordó emocionado Juan Gelman, en oportunidad de un acto en homenaje a sus 50 años en el periodismo.

Marcelo Buido, abogado de Gelman, remarcó que “en lo que respecta a los centros clandestinos de detención y tortura, el Ejército, la Aeronáutica y la Marina llevaban adelante su gestión sin interferencia de las otras armas y decidían la suerte de sus cautivos en forma autónoma. Como Automotores Orletti dependía de la SIDE, que a su vez dependía del comandante en jefe del Ejército, que en ese entonces era Jorge Rafael Videla, él es quien debe responder por estos hechos”, al diario porteño Página 12.

Por el momento, los acusados por el crimen que serán enjuiciados en la causa que instruye el juez federal Daniel Rafecas son: Néstor Guillamondegui y Rubén Visuara, ex jefes militares que estuvieron a cargo del Departamento de Operaciones de donde dependía Automotores Orletti; Eduardo Cabanillas, uno de los responsables del centro clandestino; Juan Ruffo y Honorio Martínez Ruiz, ambos ex agentes de la SIDE.

Respecto a María Claudia García Iruretagoyena, quien todavía se encuentra en condición de desaparecida, fue trasladada a Uruguay, como parte del denominado “Plan Cóndor”, donde nació su hija Macarena en el Hospital Militar, y luego la llevaron al centro clandestino “Base Valparaíso”, en ese país.

Macarena fue entregada a un comisario de la policía uruguaya, hasta que a mediados de 1999, mediante la tenaz búsqueda de sus familiares y amigos, entre los que se encontraba Juan Gelman, fue ubicada y pudo recuperar su identidad, pasándose a llamar a partir de ese momento Macarena Gelman García Iruretagoyena.

La denuncia por el traslado y secuestro de María Claudia García Iruretagoyena, en 1976, así como la sustracción de identidad de su hija Macarena, fue presentada ante la Justicia uruguaya, en el año 2002, por el propio Juan Gelman.

Seis años después, el 27 de febrero de 2008, fue Macarena quien demandó ante la justicia uruguaya la reapertura del proceso relativo a la desaparición forzada de su madre.

Este expediente había sido cerrado en virtud de la llamada ley de Caducidad que ha permitido la impunidad en Uruguay de responsables de crímenes durante la dictadura en ese país (1973-1985).