El porvenir es una voz de alerta. Y para maestros como Jorge Escala, constituye el alimento diario de su espíritu revolucionario. Desde que formó parte del Frente Democrático del Magisterio, y luego asumió la representación de todos los egresados de los institutos pedagógicos y normales del país, su mira se fijó en una patria para los trabajadores y los pueblos.

Llegó a dirigir el Frente de Vanguardia del Magisterio, desde donde asimiló las tesis de la izquierda revolucionaria. Hombre sencillo, de gran sonrisa, amistoso y perseverante como el que más, ha llegado a adquirir un liderazgo nacional como una de las voces más representativas del Movimiento Popular Democrático.

Escala con sus compañeros impulsó una dura lucha para que la Unión Nacional de Educadores, filial del Guayas, se libere del dominio socialcristiano. Lo nombraron como presidente provincial de este gremio y su actividad le permitió obtener un reconocimiento nacional, que más tarde le llevó a triunfar en las elecciones universales del magisterio, para ser nombrado Presidente Nacional de la UNE.

La actividad intensa que impulsó al dirigir el más grande sindicato del país, hizo que los trabajadores, la juventud y los pueblos del Ecuador lo visualicen como honesto y decidido líder, como una persona capaz de defender los intereses de la gran mayoría de los ecuatorianos. En una férrea unidad con los distintos sectores populares llegó a ser parte en de la Asamblea Nacional Constituyente, lugar en el que, según Escala, “se jugó un buen papel, tenemos una buena carta de presentación, hemos hecho realidad las aspiraciones de los pueblos y, por lo tanto, tenemos condiciones para seguir batallando y avanzar en la construcción de la Patria Nueva y el Socialismo”.


 La Asamblea Constituyente fue un reto histórico para quienes participaron en ella ¿cómo valora su papel en esta instancia?

 En la Asamblea Nacional Constituyente el bloque del MPD luchó por hacer realidad las aspiraciones de la inmensa mayoría de ecuatorianos. Con la movilización de la UNE, la FESE y la FEUE logramos hacer realidad el derecho de la gratuidad de la educación hasta el nivel universitario.

Fuimos los que impulsamos la lucha para acabar con la tercerización e intermediación laboral. Junto con la UGTE presentamos el mandato constituyente que elimina estas formas de explotación y, a la vez, logramos la prohibición de todo tipo de precarización laboral en la Constitución.

La movilización de los pequeños comerciantes y el accionar del bloque del MPD lograron garantizar, en el Artículo 329 de la Carta Política, el derecho de trabajar de forma digna y sin perjuicios.

Fuimos los proponentes de los mandatos de Amnistía que emitió la Asamblea. El 8 de enero del 2008 presentamos los proyectos de indulto de aquellos trabajadores que se levantaron contra la tercerización y la corrupción de Roberto Cabañas en Correos del Ecuador. Presentamos los proyectos de amnistía para los pobladores de Dayuma y los luchadores que defendieron los recursos naturales.

Todas estas propuestas y otras más, están hechas realidad en la nueva Constitución. La gente nos identifica, sabe que el bloque del MPD fue consecuente, llevó la propuesta, la presentó, discutió y defendió con valor los anhelos populares, que al final de cuentas se encuentran expresados en el mandato constitucional.

-¿Qué ejes principales guían su nueva propuesta? ¿Por qué los ecuatorianos deben volver a confiar en Jorge Escala y en el MPD?

 Necesitamos ir a grandes reformas, como por ejemplo a la Ley Minera, ya que no es posible que se mantenga el 5% de las regalías para el Estado ecuatoriano por esta actividad. Tampoco podemos dejar que se dé paso a la minería a gran escala como actualmente permite la Ley. Los militantes del MPD hemos planteado que se debe regular y fortalecer la actividad existente en esta área, es decir, fortalecer y fomentar la pequeña minería y la artesanal. Vamos a reformar esta Ley porque creemos que es un atentado a los principios de defensa de la soberanía y los recursos naturales, consagrados en la Constitución.

Planteamos introducir reformas importantes a propósito de que se aprobó la ley de soberanía alimentaria. Es necesario profundizar la democratización de la propiedad de la tierra y eso conlleva impulsar una profunda reforma agraria, que elimine el latifundio y permita al Estado ecuatoriano intervenir en la producción, lo que significa crear las cooperativas mixtas.

Es necesario ir a la creación de la nueva ley de salud, que parta de la construcción de un Sistema Integrado, el cual debe ser oportuno, gratuito y garantizado por el Estado, en el que se ponga énfasis en la asistencia de aquellas personas que padecen enfermedades catastróficas o terminales. En materia de salud la nueva ley debe sancionar a las personas que niegan los recursos que requiere el pueblo.

En materia educativa planteamos defender el concepto que se encuentra en la Constitución, es decir que sea fiscal, laica y gratuita, y no permitir su municipalización. Vemos la necesidad de impulsar una profunda reforma educativa, que promueva la participación social y que implemente un modelo educativo emancipador, en el cual las escuelas eduquen para la libertad, para la patria, para la solidaridad.

En el tema de la juventud vamos a hacer efectivo el derecho al primer empleo; derecho que está consagrado en la Constitución, pero es necesario que exista una institución que permita su ejecución.

Somos garantía del cambio, somos los luchadores consecuentes que jamás hemos traicionado los intereses del pueblo ecuatoriano y que vamos hacer realidad todo lo que hoy proponemos al país entero.

-Han planteado como consigna general de campaña la Patria Nueva y el Socialismo ¿qué encierra este planteamiento?

 La consigna implica acabar con todo este sistema de injusticia y desigualdad, por ello comprendemos que este proceso electoral es un importante escenario para acumular fuerzas y luchar por la construcción del socialismo en el Ecuador, el cual es el único sistema que garantizará el bienestar para los de abajo.