El día 8 de enero, mientras la prefecta Lucia Sosa estaba por culminar sus labores de la semana, recibió un mensaje a su celular en el cual, con frases insultantes, grotescas y ofensivas se la amenaza con “Te vamos matar”; “tienes los días contados”; más aún, como para que quede confirmación de que es una cosa seria, los autores de los mensajes volvieron a enviar otro el día 10 de enero, en el mismos sentido. Por su puesto este hecho alarmó a la Prefecta y a toda la ciudadanía, que pudo enterarse de esta situación al día siguiente por los diversos medios de comunicación.

Lucia Sosa, maestra de profesión y con un titulo de ingeniera comercial, es la primera mujer que alcanzó la prefectura de Esmeraldas: ganó su primera elección en el año 2005, periodo en el cual realiza una destacada labor en los campos de la educación, salud, vialidad, medio ambiente, aparte de que enderezó casa adentro una prefectura casi en ruinas, fruto de la incapacidad y la corrupción anteriores. Esta labor y una muy estrecha y permanente relación con las comunidades, con los cantones y pueblos de la provincia, hicieron los meritos para que Lucia Sosa fuera reelegida con una de las votaciones más altas alcanzadas en la prefectura. Enarbolando la bandera de Esmeraldas y la de su partido, el MPD, recogió nuevamente la confianza y la adhesión del pueblo esmeraldeño a su propuesta de continuar con los cambios; de “cambiar y avanzar” como reza su lema.

Según denuncia la Prefecta, “estos atentados a la dignidad y a la vida de una líder política de izquierda vienen de los sectores que no quieren ver cambiada a Esmeraldas, de aquellos que desean que la provincia se sostenga en medio de la corrupción y la desatención al pueblo. Son aquellos sectores que antes planillaban obras y nuca las hacían, quienes nunca se preocuparon de la vialidad, de la educación y la salud. Los autores de estos mensajes son todos aquellos atrasa pueblos, que dentro de la prefectura y fuera de ella pretenden detener este proceso de cambio que vive la provincia”.

La Prefectura ha presentado la denuncia correspondiente a la Fiscalía y de la misma manera ha oficiado a la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT), con el propósito de que se realice una investigación exhaustiva que dé con los autores de estos mensajes y amenazas de asesinato, porque “esta situación no puede quedar así, pues sabemos que técnicamente se puede identificar el origen y a los autores, a quiénes estarían en un eventual complot para atentar contra mi vida”, señaló la Prefecta.

Lucia Sosa estableció que una situación de inseguridad no puede resolverse con estados de excepción, donde se quita las libertades públicas a los ciudadanos sin que realmente se resuelva el problema. Lejos de este tipo de medidas, Lucia Sosa planteó que era necesario enfrentar este como un problema social, creando más fuentes de empleo, entregando los recursos a la provincias para que pueden emprender en obras que permitan el empleo de la mano de obra local, creando una serie de opciones para que nuestros jóvenes puedan ser integrados a los procesos educativos y productivos que deben promoverse desde el Estado. Los resultados de los estados de excepción aplicados en Pichincha o Manta no muestran que la inseguridad y la delincuencia haya disminuido, y esto es lógico porque no se está atacando la raíz del problema que es la pobreza, la falta de trabajo. Y llamo al gobierno a que cree más fuentes de empleo, más empresas, en definitiva más opciones para que nuestros jóvenes accedan a ocupaciones dignas y bien remuneradas.

“Nosotros seguiremos trabajando por el cambio que le ofrecimos a nuestro pueblo, que lo hemos estado realizando y esta a la vista de todos y por los cual hemos recibido un gran respaldo. No nos amedrentaran, no callaran la voz de la provincia de Esmeraldas y de quienes estamos trabajando por una autentica revolución popular. El miedo al que quieren someterle al pueblo esmeraldeño no pasara, no van a detener la acción de la prefectura y de su prefecta”, señaló Lucia Sosa,

“No iré para atrás, como pretenden los atrasa pueblos, tengo la fortaleza que me da el pueblo y la fuerza de dios, y aquí estaré dando la cara por mi provincia, poniéndome al frente de sus anhelos y necesidades”, finalizó.

El pueblo, sus organizaciones sociales y populares realizan una movilización el 20 de enero en la ciudad de Esmeraldas, para defender la vida y exigiendo al gobierno la entrega de los recursos para atender las necesidades de esta provincia, como es el asfalto, que paradójicamente siendo un producto que se elabora en la refinería estatal, se lo niega a los esmeraldeños.