Los paramilitares colombianos expresaron que este grupo indígena era un objetivo militar. (Foto: Archivo).

Unos 36 líderes de la etnia indígena misak, localizada en el suroeste de Colombia, denunciaron este miércoles que han recibido panfletos de parte del grupo paramilitar de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) por medio de los cuales se les hacen amenazas que los señalan como objetivo militar y enemigos.

Unos 36 líderes de la etnia indígena misak, localizada en el suroeste de Colombia, denunciaron este miércoles que han recibido panfletos de parte del grupo paramilitar de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) por medio de los cuales se les hacen amenazas que los señalan como objetivo militar y enemigos.

"Con gran preocupación e indignación denunciamos y rechazamos las graves amenazas que han recibido nuestras autoridades indígenas misak del Cauca (suroccidente), por parte de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC)", sostuvo un representante del grupo indígena a un medio de comunicación internacional.

La AUC es una organización ilegal paramilitar de extrema derecha que fue instaurada en Colombia en 1997 con el objetivo de conglomerar a variedad de grupos paramilitares y de autodefensa que ya existían.

Este grupo se declaró contrainsurgente y en combate con otros grupos como las Fuezas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN).

El grupo armado supuestamente se desmovilizó del territorio colombiano luego de que se firmaran una serie de acuerdos con el gobierno entre los años 2003 y 2006.

En los panfletos, los paramilitares también agregaron que irán ’’más allá de las amenazas’’ y que retornarán ’’a las actuaciones para el pueblo guambiano sin piedad ni temor alguno".

En el mismo momento que recibiera la información sobre los panfletos, la consejala Ati Quigua, perteneciente a la etnia arhuaca localizada en la Sierra Nevada de Santa Marta (norte), denunció el hecho.

Según sostuvo una fuente de los misak, esta comunidad ha sido amenazada en reiteradas oportunidades para que abandonaran sus tierras.

"El propósito de la misiva, según las AUC, es conminar a líderes indígenas para que dejen de lado el discurso y hechos arcaicos a favor de los derechos indígenas e ideologías atacando las nobles y buenas intenciones del alto gobierno a favor de la paz", sostenía un comunicado proveniente de la oficina de Quigua.

La consejala también manifestó que no entendía que este grupo paramilitar se manifestara públicamente cuando supuestamente se desmovilizaron entre los años 2003 y 2006 debido a acuerdos al que llegaron con el Gobierno de Álvaro Uribe.

Quigua y la etnia aborigen hicieron un llamado a las autoridades gubernamentales para que se brinde protección a este sector de la población conjuntamente con las autoridades de las comunidades amenazadas.

Adicionalmente, instaron a los entes de justicia e inteligencia a que se lleven a cabo las investigaciones necesarias para determinar los responsables del hecho.

La nación colombiana posee unas 102 etnias, conformadas por más de un millón de personas, de las cuales 64 están en peligro de desaparecer.

La población misak, que también es conocida como guambiana, se calcula en unas 25 mil personas de las cuales 80 por ciento se localizan en el municipio Silvia, sin embargo, también; en menor proporción se ubican en Totoró, Jambaló, Caldono y Morales, en el Cauca, y en La Plata, en el departamento del Huila.

Fuente: Prensa Yvke Mundial/Telesur, 28 de Abril de 2010.