El Dr. Edgar Herrera

Es un catedrático de amplia trayectoria que conoce el sistema educativo integralmente, pues su experiencia como docente se inicia en 1965. Ha ocupado cargos de dirección en instituciones de educación media y en la Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación de la Universidad Central del Ecuador. Un estudioso que ha logrado plasmar sus investigaciones en varias obras sobre educación, por lo que tiene múltiples reconocimientos.

Como decano recientemente electo, resalta el esfuerzo e importante legado que por generaciones ha entregado a la sociedad esta Facultad, que es pionera de encuentros nacionales de investigación; a la vez, destaca que por el deseo de mejorar la calidad de la educación superior, la mayoría de sus docentes ha cursado estudios de cuarto nivel.

Cree que la pretensión del gobierno, en el caso de la universidad ecuatoriana, es terminar con la autonomía, con los estamentos de las universidades públicas y privadas; “es por esa razón que no se escuchan opiniones distintas, ni en el seno de la Asamblea Nacional; esto ha provocado el incremento de las movilizaciones en reclamo de respeto”, dice.

Según el Decano, la autonomía es un derecho conquistado por las universidades a partir del movimiento de Córdova, Argentina, hasce casi un siglo, donde se expresa la autodeterminación de las universidades y escuelas politécnicas, tanto en lo académico como en lo administrativo y económico. “Nosotros no estamos evadiendo el control o rendición de cuentas, porque esa es una práctica permanente”.

Añade que el Estado es responsable de la calidad de la educación, también de tercer nivel, y “en estos últimos años no se ha entregado el presupuesto para la capacitación e investigación; esto no es cuestión solo de voluntad.”

Respecto de la gratuidad de la educación superior, dice: “la Constitución recoge esta aspiración, pero aquí se paga por todo, incluso por la conexión satelital.”

“La Facultad de Filosofía siempre ha mantenido el liderazgo educativo, en estas instalaciones se desarrolló la primera maestría del Ecuador, 23 maestros de diferentes universidades del país nos reunimos y, mediante un convenio con la universidad Libertador de Venezuela, desarrollamos esta maestría que nos ha permitido ampliar a lo interno de la universidad maestrías, diplomados, es decir, el cuarto nivel para varias especialidades de la Universidad Central.”

Dice sentirse orgulloso, pues a través de la Facultad de Filosofía se desarrollan maestrías en otras universidades del país, con docentes de esta Facultad. De igual forma, los mejores libros de ciencias de la educación, inclusive textos de educación básica general, son escritos por nuestros maestros.

“La universidad pública alberga a los jóvenes de extracción popular, de bajos recursos económicos, y les ayuda a que puedan crecer personalmente, con lo que se responde a las exigencias de la sociedad”, señala.

Y concluye: “Todos los que hacemos la universidad, es decir docentes, estudiantes ,empleados, trabajadores, autoridades, debemos involucrarnos en la planificación, en el cambio.”

Unas elecciones sin precedentes


Las elecciones al interior de la Universidad Central se caracterizaban por el respeto de pensamiento entre los docentes, trabajadores y estudiantes a la hora de elegir sus representantes, y a pesar de existir opositores ideológicos, todos trabajaban por el desarrollo académico y científico del alma mater. No había perseguidos ni expulsados. Ahora no se puede decir lo mismo, muchos proyectos de investigación se han suspendido, afectando no solo el proceso académico, sino la institucionalidad y lo económico de la UC, en los procesos electorales solo se acepta una tendencia, la del rector Edgar Samaniego.

En Filosofía se pretendió seguir esta lógica en las elecciones del 22 de julio, el Tribunal Electoral, cercano al rector, por primera ocasión y con el afán de controlar totalmente el proceso, trasladó los recintos electorales al Coliseo Universitario; dos candidatos se disputaban ese cargo: por la Lista 1 Frente de Unidad y Defensa liderada por Edgar Herrera y Galo Arellano, y la Lista 2 Filosofía por el Cambio por Patricio Andino. Ese jueves, este último, así como los allegados al rector, daban como un hecho su ganancia, en perspectiva, por lo menos por parte del rector, estaba también aplicar autoritarismo, prepotencia en la Facultad, acosando y despidiendo o expulsando a quienes emitieran criterios distintos, actitud muy parecida a la del Presidente de la República.

A las 18h30 se dieron a conocer los resultados: la lista 1 Frente de Unidad y Defensa obtuvo 2869 votos, gracias al apoyo mayoritario de docentes, trabajadores y estudiantes; mientras que la lista del rector consiguió 1652. El Tribunal Electoral, por su parte, debió legitimar la victoria de Edgar Herrera y Galo Arellano y proclamar los resultados.
Esta victoria de la Facultad de Filosofía, la más grande de la UC, no es más que el reconocimiento a la democracia y al libre pensamiento, al trabajo en equipo, al esfuerzo, al compromiso de docentes progresistas y de izquierda por entregar profesionales capaces y con una formación integral, que eleve el nombre y la calidad de la Universidad Central (ARS).