El primer ministro ruso, Vladimir Putin, recibió el 19 de agosto de 2010 a Serguei Kiriyenko, director general de la empresa pública rusa Rosatom.

La entrevista cumplía dos objetivos. Por un lado, mostrar a la opinión pública interna que las instalaciones nucleares rusas estuvo correctamente garantizada durante los recientes incendios y hacer notar además a Estados Unidos, Israel, Canadá y la Unión Europea que el primer ministro ruso ordenó personalmente la entrega definitiva de la central de Bushehr a Irán, a pesar de la oposición del mencionado cuarteto y del presidente ruso Medvedev.

Al término del encuentro, Kiriyenko salió para Irán para proceder a la entrega de la central.
Turquía, Vietnam y Bangla Desh están negociando actualmente la compra de centrales nucleares a Rosatom.