Para suerte de América y de todos los ecuatorianos, los graves acontecimientos ocurridos en la hermana república del Ecuador tuvieron un final feliz, a pesar de la violencia y la sangre derramada.

El Presidente Rafael Correa fue devuelto a la jefatura de la nación y de regreso al palacio presidencial, después del secuestro del que fue víctima por una banda de policías ignorantes, manipulados por inescrupulosos politiqueros ambiciosos de dinero y poder, encabezados por el ex presidente Lucio Gutiérrez, el primer mandatario de los ecuatorianos pronunció un viril discurso de gran valor histórico, que bien vale la pena repetirlo a nuestros oyentes, por lo que de patriótico y valiente tienen sus palabras.

Ya libre de sus secuestradores después del fallido intento de Golpe de Estado, dijo el presidente Correa desde el Palacio presidencial:
“Este es un día de profunda tristeza. Jamás creí que iba a llegar en este Gobierno que es de paz y busca ayudar a todos los pobres.”
“Quiero hacer un minuto de profundo silencio, porque tuvo que ir el ejército a rescatarnos y me dijeron que por lo menos hay un policía caído. Me salieron las lágrimas de tristeza, se tuvo que derramar sangre ecuatoriana inútilmente.

Todavía no sabemos cuántos son los caídos, pero en nombre de sus familiares, hagamos un profundo y sentido minuto de silencio.
Quisieron detener a la Revolución Ciudadana con la mentira, espero que hayan aprendido la lección.

“Agradecimiento a los miles de compañeros que fueron a rescatarme a la policía, al hospital. Seguramente fueron recibidos con gases. ¿Cómo pueden llamarse policías los que se comportaron de esa manera?”

“Muchas gracias a esos héroes que me acompañaron en esta jornada. A mi guardia personal que fue pateada y maltratada”.
“Pese al peligro y estar cercado, empezaron a llegar funcionarios del Estado, a morir si es necesario, con ese valor y esa lealtad nada ni nadie nos podrá vencer”.

“Un agradecimiento a los presidentes de América Latina y el mundo que se solidarizaron con nosotros. UNASUR en estos momentos se reúne para analizar la situación. Es increíble que se subleve no toda la fuerza policial, no para luchar contra un Gobierno tiránico, se sublevan para buscar supuestas remuneraciones que se la han quitado”.

“¿Cómo pueden jugar por una cosa tan banal con el futuro de la patria?”
“Nadie ha apoyado tanto a la policía como este Gobierno, nadie ha mejorado tanto los sueldos. En ese momento, cuando vi tanta agresividad, me sentí profundamente triste. ¿Cómo después de todo lo que habíamos hecho con la policía, nos hacían esto?”

“No eran todos. Cuando me dirigí a ellos, se reveló lo que estaba detrás. La gente de Lucio Gutiérrez (ex presidente ecuatoriano) estaba ahí infiltrada, azuzando”.

“Ningún policía había leído la ley, se habían dejado llevar por lo rumores que hacen los vende patrias. Habíamos hecho la ley del servicio civil para evitar los abusos, los atropellos, los sobresueldos, esas canastas navideñas con plata de todos ustedes, eso fue lo que prohibimos”.

“¿Saben cuánto ganaba un policía como gran premio después de cinco años de servicio? 800 dólares y les pagaban 250. Hoy el que menos gana, recibe 700 dólares. Y dicen que no tomamos en cuenta sus condiciones especiales de trabajo. Por el contrario, por primera vez se toma en cuenta y se reconoce para las fuerzas armadas, la policía y los bomberos, horas extras y jornadas especiales. Ni siquiera habían leído la ley por la que se habían insubordinado y traicionado a la patria”.

“Más que nunca compañeros, vamos a unirnos para vencer a estos vende patrias y sacar la patria adelante”.

«Hoy el presidente no ha claudicado como hicieron otros cobardes. Yo les decía en mi prisión, o salgo como presidente de una nación digna, o salgo como cadáver”.

Esas fueron las valientes palabras pronunciadas por el Presidente de la hermana república del Ecuador a su regreso al palacio presidencial, ya libre del cautiverio a que lo habían sometido unos insensatos policías golpistas enemigos de su pueblo y su nación.

Los golpistas de aquí, de allá y de todas partes se quedaron con la ganas. Que viva Correa y que viva el pueblo digno y valiente del Ecuador.