A la par que habla, Filemón Medina Ramos, Secretario General del Sindicato de Periodistas de Panamá (SPP), nos acerca el pormenorizado Informe que dicha entidad hiciera sobre el estado de la Libertad de Expresión en el país.

Tal cual lo expresa el escrito, el compañero Filemón Medina Ramos resalta que el 2010 ha sido considerado como un “año pésimo, tal vez el peor para los periodistas y medios de comunicación, en el ejercicio de su deber profesional, en los últimos veinte años”.

En coincidencia se manifiesta la compañera Norma Núñez Montoto, actual presidenta del Consejo Nacional de Periodismo (CNP), vicepresidenta de la Federación Latinoamericana de Periodistas (FELAP, por Panamá, integrante del SPP y, por sobre todo, una periodista de reconocidísima trayectoria profesional, gremial, social y política, en su país y en toda Latinoamérica y el Caribe.

Apuntalando el Informe se expresa –sumando su experiencia- el compañero Garrit Geneteau, subsecretario general del SPP, profesor de periodismo y comunicación, ex directivo de la FELAP y militante activo de nuestra organización continental.

Con los nombrados, la FELAP –representada por su secretario general adjunto, Nelson del Castillo y su presidente, Juan Carlos Camaño-, analizó la realidad de los medios y los periodistas panameños y de la región. En el intercambio, los compañeros de Panamá hicieron énfasis en que lo dramático de la situación vivida durante el 2010 fue parte de la plataforma desde donde, ahora, se han lanzado nuevos ataques a los trabajadores de la prensa.

“Vivimos la caza de periodistas, con la reapertura de de 51 procesos legales a profesionales acusados de calumnias e injurias…”

En la conversación, los compañeros sostienen que “Nunca antes se había concentrado tanto el poder comunicativo. Así como nunca antes el capital tuvo tanto peso ni había impuesto tantas limitaciones a la libertad de prensa y de expresión como en estos días”.

En el análisis aparece otra cuestión que muchas veces se observa de forma sesgada como la panacea del desarrollo, sin más: la tecnología. “Nunca antes las tecnologías y los costos financieros habían impuesto tanto su tiranía sobre la competencia comunicativa, arrasando a pequeños y medianos capitales”.

El Sindicato de Periodistas de Panamá también se ha pronunciado –y lo sigue haciendo- de diferentes maneras, contra la “criminalización de la protesta”, contra las “violaciones a las convenciones de trabajo”, contra las políticas económicas y sociales que someten a los trabajadores a “vivir como parias por la desregulación de las normas laborales”, contra las prácticas abusivas que agraden a “las organizaciones populares conformadas por ciudadanos que cada vez ven más lejanas las posibilidades que se les reivindique como seres humanos”.

En un evidente compromiso con los trabajadores de la prensa, el SPP –a través de las voces de sus dirigentes- entiende que su labor no debe reducirse tan solo a la corporación periodística. Así lo hace saber esta entidad en la reunión, cuando repasa el estado de situación del país y, fundamentalmente, las penurias de los hombres, mujeres y niños, de toda la sociedad.

En el Informe elevado –entre otras instituciones-, a la FELAP, el SPP es claro y contundente respecto de su mirada social. En un párrafo que precede al extenso listado de agresiones a periodistas, se destaca que: “…el cumplimiento del deber de darle seguridad y tranquilidad a la sociedad es posible, en eficiencia y eficacia, cuando la administración pública actúa con sensibilidad y prontitud en la solución de los problemas más acuciantes que afectan el derecho a la vida y a vivirla con dignidad de parte de los más pobres”.

Federación Latinoamericana de Periodistas (FELAP).