El comentario que sigue lo hice al artículo "Vive a cuerpo de rey" del diario La Primera de hoy 7-11-2012; empero, varios lectores me han hecho saber que en la edición on line del periódico no figura; en otros términos lo han suprimido o eliminado, los que así piensan de la “libertad” de prensa. En tal virtud reproduzco el texto que guardo en mi archivo.

La negación de penólogo o penitenciarista, de nombre Kenyi Fujimori Higuchi, mostró todos los espacios coloreados de DIROES que pertenecen al INPE, pero no dijo que este adormecido órgano, al mando de Pérez Guadalupe, de la ministra de Justicia Rivas y del presidente Humala, ha puesto a disposición, toda esa área de 10,050 m2, de su único "preso", mejor, solo huesped dorado o golden inmate, llamado Alberto Fujimori, desde los tiempos de Alan García, que el actual gobierno no ha modificado en nada.

Recuerden que Kenji con el puntero señaló, a la prensa convocada al domicilio de Keiko,
el taller de pintura que está muy lejano del dormitorio del reo, que requeriría una mototaxi para llegar a sus clases de pincel. Pero no refirió quiénes le enseñan a pintar a su padre, cuántos son y quién paga a tales enseñantes y al personal de enfermeras y médicos al servicio del reo.

Ni qué hablar del inmenso patio donde Fujimori hace footing, deambula y filosofa sobre la recuperación del poder perdido, que partiendo del dormitorio dibuja en forma de L una casi señorial avenida hasta llegar al taller de pintura.

En suma, los espacios que este enceguecido hijo mostró, de colores amarillo, verde, morado, blanco, y otro que no distingo en el cuadro que mostraba, están bajo la férula de la acrisolada corrupción que jefatura el preso y de las autoridades de la misma índole de este gobierno que conceden silentes estas gollerías.

Además de tan extenso espacio físico, pretenden encima el indulto, aunque estuviere prohibido por leyes y fallos judiciales. Lo legal, moral y ético no les importa un bledo, por eso el propio trámite de la gracia presidencial lo han constituido en un fraude procesal con Nakazaki dentro, en búsqueda de una excarcelación temprana de Fujimori, aunque sea a título delictivo de encubrimiento personal con doble agravación.

Los amplísimos espacios de la "cárcel" dibujada y coloreada por Kenyi, menos mal, se convierten en un torpedo de la gracia presidencial añorada. ¡En el mundo no existen megacárceles para una sola persona!, peor aún si la condena del interno es por crímenes de lesa humanidad, secuestro agravado y rampante corrupción.

Gracias Kenyi por apoyar nuestra causa de oposición al inmerecido indulto de tu condenado padre; tu miopía intelectual lo puede todo.