El rey Abdallah de Arabia Saudita estaría a punto de anunciar una revisión de su política exterior y de preparar su sucesión, según se afirma en Londres y Ginebra.
Ante esa perspectiva, el príncipe Bandar Ben Sultán, jefe de los servicios de inteligencia, está siendo acusado de padecer problemas cognitivos como consecuencia del atentado que sufrió en julio de 2012 mientras que el príncipe Saud Al-Faisal, ministro de Relaciones Exteriores desde hace 38 años, estaría aquejado de problemas de senilidad.
Hace una semana que varias fuentes vienen anunciando que el príncipe Bandar está hospitalizado en Estados Unidos para someterse a una operación. Durante su hospitalización, un emisario especial de Washington parece haber sido enviado a Riad para reunirse con el rey y con el hijo del monarca.
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