La 4ª Cumbre de la Conferencia sobre Interacción y Medidas de Confianza en Asia (CICA) comenzó en Shanghai el 21 de mayo de 2014. Surgida después de la desaparición de la Unión Soviética, la CICA se plantea como objetivo favorecer la estabilidad en Asia, según el modelo de la OSCE (Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa).

Sin embargo, La CICA había carecido de funcionamiento real por falta de liderazgo regional, durante los años 1990 y 2000, y debido a la ausencia de diálogo entre los países miembros.

Bajo la presidencia de Turquía la CICA se mantuvo inactiva y el presidente Gul ni siquiera participa en la Cumbre de Shanghai.

Pero todo parece a punto de cambiar en este momento, bajo la impulsión de Rusia y China. Con la incorporación de Qatar y Bangladesh, el número de Estados miembros de la CICA se eleva actualmente a 26.

Los presidentes de Rusia y China han decidido reforzar el pago de sus intercambios bilaterales en monedas locales, desechando así el dólar estadounidense. Se da además por seguro que la Cumbre adoptará una Declaración Común con la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS).