Estados Unidos y las monarquías del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) han bombardeado durante 2 días varios puntos del territorio sirio, oficialmente para acabar con el Emirato Islámico.

Los bombardeos han afectado principalmente la región de la ciudad siria de Raqqa –de donde el Emirato Islámico ya se había retirado 2 días antes del inicio de esos ataques [1]– y 12 refinerías.

Según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH, una oficina de la Hermandad Musulmana que difunde información del MI6 británico), en los bombardeos han muerto solamente 14 yihadistas, que probablemente ni siquiera eran miembros del Emirato Islámico.

[1«Estados Unidos y el CCG bombardean objetivos desconocidos en Siria», Red Voltaire, 23 de septiembre de 2014.