Los talibanes se muestran muy abiertos a un posible acuerdo para compartir el poder en Afganistán durante las negociaciones emprendidas recientemente en Qatar. Pero sorprendieron al presidente Ashraf Ghani al exigir que Estados Unidos cese de inmediato los ataques aéreos nocturnos así como la liberación de los prisioneros que los estadounidenses torturan actualmente y el levantamiento de las sanciones de la ONU contra sus comandantes.

Las negociaciones, iniciadas el 3 de mayo de 2015, se desarrollan bajo la égida de la ONG Pugwash Conferences on Science and World Affairs.

Los talibanes han anunciado la reapertura de la embajada que habían abierto brevemente en Qatar, en junio de 2013, cerrada al cabo de sólo un mes de funcionamiento, después de la abdicación del emir Hamad al-Thani.

La delegación de los talibanes a la negociación en Qatar ha declarado que los talibanes están dispuestos a deponer las armas cuando las tropas extranjeras hayan salido de Afganistán. Sin embargo, el presidente Ashraf Ghani intervino recientemente precisamente para posponer la retirada de las tropas estadounidenses y obtuvo, en marzo de este año, el compromiso de que el Pentágono mantendrá 10 000 hombres en Afganistán.