En el regulador OSITRAN el ridículo se da la mano con lo insólito y se producen hechos que generan carcajadas de burla y conmiseración. Lo atroz es que el pueblo paga con sus impuestos la ineptitud de funcionarios mediocres y atrabiliarios. Leamos y repitamos con Ripley: ¡aunque usted no lo crea!

En días pasados dábamos cuenta del doble despido del que había sido objeto el señor Jesús Balladares Sandoval, ex Tesorero de la institución, pues ya se le había apartado de la entidad, mediante sucesivos despidos, tanto en diciembre 2014 como en junio del año en curso. En ambas ocasiones con el visto bueno del inepto Gerente de Asesoría Jurídica, Jean Paul Calle Casusol, y con la firma de otro inepto al frente de la Gerencia General, Obed Chuquihuayta Arias. (OSITRAN ¡despiden a un despedido! http://www.voltairenet.org/article187946.html?var_mode=recalcul), 21-6-2015

Hasta aquí pensábamos que los mencionados funcionarios, denunciados por delitos como Peculado y otros de similar gravedad, no podían continuar equivocándose y que iban a encontrar una salida adecuada al desatino cometido en junio y que causó hilaridad tanto en el sector público como entre las empresas concesionarias y supervisoras a cargo de OSITRAN, con el consiguiente descrédito y deterioro de la credibilidad del regulador, otrora de los más prestigiados del país. Por desgracia, no ha sido así.

Carta de antología

El 1 de julio llegó al domicilio de Balladares Sandoval la Carta Nº 018-2015-GA-OSITRAN, suscrita por Ysmael Mayuri Quispe como encargado de dicha gerencia. Este señor funge también como contador de la entidad y antes estuvo encargado de la Jefatura de Personal, es decir, es un multidisciplinario útil para, literalmente, cualquier cosa. A dicha carta se acompaña la Resolución Nº 088-2015-GG-OSITRAN fechada el 15-6-2015 y se anexa el Informe Nº 002-2014-CE-OSITRAN del 22 de diciembre del 2014, es decir, unos días antes del primer despido que sufriera el ex Tesorero de OSITRAN; y las Notas Nº 001 y 002-2015-CE-OSITRAN, del 18 de febrero y 22 de mayo, respectivamente.

En todos estos documentos tiene participación Calle Casusol, sea como Presidente de la Comisión Especial, y por lo tanto responsable de los informes sancionadores y de las notas complementarias en las que se ratifica en su posición de despedir a Balladares por supuestos errores en las declaraciones tributarias del año 2012, sea como Gerente de Asesoría Jurídica y por lo tanto responsable con su visto bueno del contenido de las resoluciones que se emiten por la Presidencia y Gerencia General.

Yerros al por mayor

Es decir, Calle Casusol, solo en este proceso se ha equivocado, por lo menos, cinco veces: cuando permite la publicación de la resolución e informe correspondiente en junio pasado, por la que se despide por segunda vez al ex Tesorero, violando entre otros, su derecho al buen nombre y a la defensa y cuando se le remite la resolución del 1 de julio y los informes y notas complementarias, pues insiste en el absurdo que a continuación comentaremos.

Antes cabe mencionar, que los otros integrantes de la Comisión Especial, Manuel Carrillo Barnuevo y Luis Quesada Oré, acompañan con sus firmas a Calle Casusol en todo este desaguisado. Preocupa que el primero de los nombrados, sea Gerente de Regulación y el segundo, Jefe de Estudios Económicos, por lo tanto responsables de los análisis y opiniones técnicas que respecto a tarifas y adendas, emite el regulador y sin embargo, con tan poco criterio, se dejen manipular por el inexperto Gerente de Asesoría Jurídica.

Terquedad de mulas

Con el afán de mantener su posición de que Jesús Balladares, ex Tesorero, sí puede ser despedido dos veces es que se formula la Resolución Nº 088-2015-GG-OSITRAN en cuyo primer artículo se dice que aun cuando corresponde que sea despedido por las supuestas faltas tributarias cometidas, pero que como ya ha sido despedido antes, corresponde que esta sanción "forme parte de su legajo personal". Es decir, en la práctica, vuelve a despedir a Balladares, pues en ninguna parte de la resolución de marras se deja sin efecto la indebidamente publicada Resolución Nº 082-2015-GG-OSITRAN de junio, ergo, sigue vigente.

¿Tanto le cuesta a Calle Casusol admitir que se equivocó, que prefiere persistir en el error?

¿No era acaso más fácil volverse a reunir los miembros de la Comisión y cambiar la sanción a una pecuniaria, tal como se ha aplicado, por el mismo caso, al ex Contador de la entidad?

¿Y este señor es el asesor legal de la presidencia del organismo regulador que mayor monto de inversiones debe supervisar?

Reflexiones

Caben algunas observaciones sobre este triple despido: ¿cómo serán comunicadas estas sanciones al Registro Nacional de Sanciones, Destituciones y Despidos, dependiente de la PCM?, ¿cómo hará ésta para registrar este triple despido?, ¿cuál será el proceder o desconcierto de SERVIR por recibir apelaciones por despidos por la misma causa al mismo trabajador y por tres veces en diferentes meses y años?

Don Obed, Don Obed

Y en todo este entuerto ¿qué papel juega el Gerente General, Obed Chuquihuayta Arias, que firma sin mayor análisis cada una de las resoluciones de despido mencionadas?, ¿está pintado en la pared, es mudo o no entiende el papelón que protagoniza?