Los ministros de Defensa de los países miembros de la OTAN, reunidos en Bruselas el 8 de octubre de 2015, aprobaron el plan de la Fuerza de Intervención Rápida y la creación de 2 nuevos cuarteles generales de la alianza atlántica en Hungría y Eslovaquia.

Al abordar el tema de las violaciones del espacio aéreo turco por aviones rusos que participan en las operaciones contra las organizaciones terroristas en Siria, la OTAN rechazó el pedido turco de mantener en su territorio los misiles Patriot anteriormente desplegados.

Los mencionados misiles antimisiles Patriot fueron desplegados en la frontera turco-siria en momentos en que la OTAN pretendía impedir que el Ejército Árabe Sirio recuperara el control del norte de Siria. Pero la OTAN anunció recientemente la retirada de los Patriot, en cuanto los presidentes Barack Obama y Vladimir Putin se pusieron de acuerdo sobre la operación militar rusa en Siria, e incluso antes del anuncio público de dicha operación.

Desde el primer día de bombardeos aéreos rusos, varios oficiales turcos ilegalmente desplegados en territorio sirio resultaron muertos durante las acciones de la aviación rusa.

Durante los últimos días, aviones de guerra rusos han violado repetidamente el espacio aéreo de Turquía, incidentes que la parte rusa atribuye a imaginarios problemas meteorológicos. Numerosos expertos occidentales han afirmado que la aviación rusa está poniendo a prueba los tiempos de respuesta de las fuerzas armadas turcas. La realidad es que Rusia está combatiendo contra el ejército turco, que sigue dirigiendo a los grupos terroristas que operan en Siria y proporciona refugio y ayuda a los yihadistas que huyen de los bombardeos rusos.

El Consejo del Atlántico Norte se limitó a hacer que el secretario general de la OTAN declarara «inaceptables» esas violaciones del espacio aéreo turco, además de expresar su solidaridad con Turquía.