En la foto, David Petraeus –a la izquierda– con su protector Henry Kravis –a la derecha. El multimillonario fundador de KKR es un donante inevitable en la vida política estadounidense, además de ser miembro del Grupo de Bilderberg, la red de influencia de la OTAN.
El secretario estadounidense de Defensa, Ashton Carter, tendrá que decidir próximamente si degrada o no al general de cuatro estrellas y ex director de la CIA David Petraeus.
Este último, arrestado e incluso esposado cuando fungía como director de la CIA, confesó ser culpable de haber transmitido información clasificada a su amante y biógrafa Paula Broadwell. Aunque escapó a una pena de cárcel, fue entonces condenado a 100 000 dólares de multa.
Sin embargo, el general reconoció recientemente que en realidad prestó a Paula Broadwell 8 libretas de notas personales redactadas cuando fungía como comandante de las fuerzas de ocupación en Afganistán. El problema es que esas libretas de notas contenían numerosísimas informaciones confidenciales, incluyendo las identidades de agentes que actuaban bajo diferentes fachadas, las capacidades en materia de inteligencia, síntesis sobre las reuniones del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos y sobre las conversaciones del general con el presidente Barack Obama.
Aunque ordenar la degradación de un oficial varios años después de los hechos que se le imputan sería una medida de carácter excepcional, el secretario de Defensa podría castigar de esa manera a David Petraeus por los complots que urdió por cuenta del fondo de inversiones KKR.
Petraeus, quien fue uno de los creadores del Emirato Islámico en Irak (que posteriormente se convertiría en actual Emirato Islámico, también designado como Estado Islámico o por las siglas EI, EIIL, ISIS o ISIL) ha seguido organizando el respaldo de transnacionales y Estados a esa organización terrorista, saboteando así la política de la Casa Blanca, además de tratar de torpedear el acuerdo del grupo 5+1 con Irán.
De ser degradado, David Petraeus pasaría de ser general de cuatro estrellas a general tres estrellas y tendría que reembolsar la diferencia ya cobrada en el monto de su jubilación, o sea la diferencia entre el retiro de 220 000 dólares anuales de un general de cuatro estrellas y los 170 000 dólares anuales correspondientes a la jubilación de un general de tres estrellas. En todo caso, esa devolución no debería resultarle particularmente dolorosa dado el elevadísimo salario que recibe de KKR.
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