Y es que a escasos 9 meses de haber sido nombrado como su director, el maestro en ciencias computacionales Jorge Sánchez Santiago prácticamente tiene un pie fuera de la filial. El asunto se debate tanto en el equipo cercano al director de Pemex, José Antonio González Anaya, como entre los miembros del Consejo de Administración de PMI; y según fuentes internas el anuncio podría darse en los próximos días.

En la discusión se ha posicionado un nombre para sustituir a Sánchez Santiago. Se trata de Isaac Volin, quien en mayo de 2010 asumiera la dirección general de BlackRock México, empresa ligada a los negocios financieros de Pemex, y que actualmente se desempeña como consultor de Akya.

Las fuentes consultadas por Agenda de la Corrupción observan que la permanencia de Sánchez Santiago al frente de PMI es frágil, pues no ha sabido responder a las exigencias de Pemex Corporativo ni sacar adelante proyectos multimillonarios que quedaron pendientes desde la pasada administración, que encabezó José Manuel Carrera Panizzo.

Ello, a pesar de que la filial ya no es vigilada prácticamente por ninguna autoridad ni órgano de control, pues con la reforma energética dejaron de tener facultades de fiscalización tanto la Secretaría de la Función Pública como la Auditoría Superior de la Federación.

En caso de confirmarse, la incorporación de Volin a PMI podría fortalecer aun más las relaciones entre Pemex y BlackRock, que ha financiado proyectos faraónicos de la petrolera a cambio de rentabilidades garantizadas.

De acuerdo con las fuentes, el objetivo de Volin sería agilizar aquellos proyectos que Sánchez Santiago no ha logrado concretar. Entre ellos, los ductos Golfo Centro, Transoceánico –con su escollera de 2 mil millones de dólares– y Norte. Además, aumentaría la inversión en acciones y compra de empresas, tipo Fertinal y Agronitrogenados.

Relación Pemex-BlackRock

La relación de BlackRock con Petróleos Mexicanos inició y se fortaleció en 2015. En marzo de ese año se daba a conocer la primera firma de un acuerdo para que ese fondo privado trasnacional, junto con First Reserve, invirtiera en el gasoducto Los Ramones II.

Firmado entre la filial PMI, BlackRock –considerada como la mayor gestora de activos del mundo– y First Reserve –la mayor firma de inversión de capital privado en el sector de energía–, dicho acuerdo les permitió adquirir una participación combinada de 45 por ciento (equivalente a aproximadamente 900 millones de dólares) en el proyecto.

La construcción del gasoducto es uno de los proyectos más importantes del sector de gas y petroquímica básica, pues, con una extensión de 744 kilómetros, garantizará el suministro de gas natural a la industria nacional.

De acuerdo con el boletín de prensa emitido por la petrolera, se trató de la primera inversión en infraestructura de BlackRock en el país. “La firma tiene la intención de establecer una mayor presencia en México”, afirmaba Pemex.

Así fue. Para el 1 de junio de 2015 ambas empresas acordaron un memorándum de entendimiento para acelerar el desarrollo y el financiamiento de proyectos de infraestructura energética estratégicamente prioritarios. Éste fue firmado por el director corporativo de Finanzas de Pemex, Mario Beauregard, y por el director global de BlackRock Infrastructure, Jim Barry.

También participó Carrera Panizzo, que para entonces ya fungía como director corporativo de Alianzas y Nuevos Negocios de la petrolera, y quien durante la firma declaró que con ésta se impulsarían nuevos proyectos con soluciones de financiamiento eficientes, “en los que BlackRock aportará su experiencia financiera, su capacidad de manejo de riesgo y sus fuentes de financiamiento”.

Dos meses después, el 29 de julio, era el Consejo de Administración de Pemex el que ampliaba aún más esta relación. Ese día “autorizó la alianza estratégica, que no implica recursos de inversión, entre Petróleos Mexicanos e Impulsora y Promotora BlackRock México, SA de CV, a través del establecimiento de una oficina conjunta de administración y estructuración de proyectos, para lo cual se deberán suscribir al efecto los actos jurídicos que resulten necesarios, cumpliendo con las disposiciones legales aplicables”.

Lo anterior, “con fundamento en lo dispuesto por el artículo 3, fracción XXVI, de la Ley de Petróleos Mexicanos”, se lee en el acta de la sesión ordinaria 895 de dicho Consejo.

Para el 30 de octubre de ese mismo año, Pemex anunciaba el inicio de la primera fase de desarrollo del Proyecto Golfo Centro, para el suministro de gasolinas y diésel del puerto de Tuxpan, Veracruz, al centro del país.

De acuerdo con la información oficial, la inversión se estimó en 700 millones de dólares. “La estructuración financiera se hará en conjunto con BlackRock, lo que representará la primera estructuración financiera derivada del memorándum de entendimiento firmado en mayo pasado [2015] con dicha entidad”, informó la petrolera.

Si a PMI llega Volin, quien conoce las entrañas de BlackRock, ¿qué más podemos esperar?

Fuente
Contralínea (México)