¿Creyó alguien que en un congreso controlado por el alanismo, iba a haber “renovación” o “limpieza”? Los que se retiraron “denunciando trampas”, hasta hace pocas horas, comparsas, cómplices, encubridores de todas las estafas, robos y maniobras contra la militancia, ¿recién se dieron cuenta cómo funciona la aplanadora que dirige el ex presidente?
Perú es testigo de cómo una gavilla incapaz de comprender que el 2016 apenas si llegó con muchos favores al 5.8% de la votación, liderados por la megalomanía envejecida del ex mandatario, ha vuelto a apoltronarse en la “dirección” del Apra. ¿Luces, intelectualidad, planes, doctrina, honestidad? ¡Nada de nada, pura hermandad de estafadores de la fe pública.
¿Qué protegen los alanistas? Es evidente que ningún principio ideológico, mucho menos ético. ¿Qué esconden? ¡He allí una clave que tiene que ver con alquileres, remate de locales, disminución de patrimonio! Pero hay una conclusión inequívoca que señala el derrotero hacia la disolución del Partido Aprista y su enterrador se llama Alan García Pérez.
Tiempo atrás escribí: "No hay escatología o injuria en que no hayan incurrido los ladrones alanistas: destruyeron al Partido, lo despojaron de ideología, pulverizaron la Fraternidad, lo anemizaron en su concepción social de Frente Unico de Trabajadores Manuales e Intelectuales, escupieron sobre el sacrificio de sus héroes y mártires, convirtieron el robo y la monra en “formas de vida” y la mejor demostración es que para el habitante común y corriente “todos los apristas son vulgares rateros”. Al estafador, caco y vil exaccionador simplemente hay que reconocerlo como tal. Y de manera vitalicia.
¡A estos no se les saluda, se les escupe con indignación!
Ser alanista es exhibir prontuario y ser mirado con la sospecha de que robó o dejó robar o copió y se apropió de lo que no era suyo. Siempre un elemento postizo, inane, innoble, capaz de negociar por unas pocas monedas cualquier afán egoísta.
¿Qué esperan los buenos apristas supérstites en todo el Perú para ponerse los pantalones y limpiar el templo de tanta traición?
¿He dicho algo distinto de lo que todos conocen pero de lo que NO hablan? Problema y miedos ajenos, no míos." ¿Son invencibles ladrones alanistas?
http://www.voltairenet.org/article168547.html, 21-2-2011
Pocos días atrás en Miraflores echaron abajo un cartelón con la foto de Alan García. Un gesto simbólico que merece repetición masiva en todo el país.
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