Según el presidente estadounidense Donald Trump, Arabia Saudita estaría dispuesta a financiar ‎lo fundamental de la reconstrucción en la República Árabe Siria. ‎

Durante los últimos 7 años, Arabia Saudita gastó 500 000 millones de dólares tratando de ‎derrocar al presidente sirio Bachar al-Assad. El principal reproche que el reino de los Saud hacía ‎al presidente Assad era el hecho de no ser sunnita. Por lo demás, Arabia Saudita estaba ‎dispuesta a aceptar que se mantuviese la República y que Assad fuese reemplazado por su ‎vicepresidente. ‎

La decisión saudita sobre el financiamiento de la reconstrucción de Siria aparece después del viaje ‎del presidente sudanés Omar el-Bechir a Damasco. ‎