El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, se reunió con los tres principales ‎dirigentes del Líbano –el presidente de la República, Michel Aoun (cristiano maronita); el ‎primer ministro, Saad Hariri (musulmán sunnita); y el presidente del parlamento, Nabih Berri ‎‎(musulmán chiita)– durante su visita oficial en ese país, el 22 de marzo de 2019.

 Sobre los temas energéticos, el secretario de Estado propuso que el Líbano reconozca la línea ‎trazada por el embajador estadounidense Frederic Hof para delimitar las zonas marítimas de Israel ‎y del Líbano, lo cual facilitaría la explotación de las reservas de gas que existen en ellas. ‎Sus interlocutores libaneses rechazaron esa propuesta, ya que una sexta parte de las aguas ‎territoriales libaneses quedarían bajo control israelí.

 Sobre el tema sirio,
• el secretario de Estado trató inicialmente de lograr que el Líbano se alineara con la posición ‎del Small GroupPequeño Grupo», conformado por Arabia Saudita, Estados Unidos, Francia, ‎Jordania y el Reino Unido), pero los libaneses le recordaron que en junio de 2012 el Líbano ‎se comprometió –precisamente a pedido de Washington– a mantener una política de neutralidad ‎y a no modificar esa posición sin una amplia concertación;
• y que el Líbano mantenga en suelo libanés a los refugiados sirios para poder utilizarlos como ‎medio de presión contra la República Árabe Siria, pero sus interlocutores se opusieron a ello. ‎De hecho, no hay razones que justifiquen la permanencia de refugiados sirios en Líbano ahora ‎que la guerra ha terminado en casi toda Siria, que además necesita el regreso de sus nacionales, ‎que salieron del país para escapar a los combates. ‎