A continuación se presenta el texto de una declaración conjunta sobre Afganistán que divulgaron inicialmente los siguientes firmantes: Albania, Alemania, el Alto Representante de la UE para Relaciones Exteriores y Política de Seguridad, Australia, Austria, Bahamas, Bélgica, Burkina Faso, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Costa de Marfil, Croacia, Dinamarca, El Salvador, Eslovaquia, Eslovenia, España, Estonia, los Estados Federados de Micronesia, Fiyi, Finlandia, Francia, Georgia, Ghana, Grecia, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Islandia, Islas Marshall, Irlanda, Italia, Japón, Kosovo, Letonia, Liberia, Liechtenstein, Lituania, Luxemburgo, Macedonia del Norte, Malta, Mauritania, Montenegro, Nauru, Níger, Noruega, Nueva Zelandia, Países Bajos, Palaos, Panamá, Paraguay, Polonia, Portugal, Qatar, el Reino Unido, la República Checa, la República Dominicana, la República de Chipre, la República de Corea, Rumania, Sierra Leona, Surinam, Suecia, Togo, Tonga, Uganda, Ucrania y Yemen.

Ante el deterioro de la situación de seguridad, estamos dando apoyo y trabajando para asegurar la partida segura y ordenada de los ciudadanos extranjeros y afganos que desean irse del país, e instamos a todas las partes a respetar y facilitar esta tarea. Quienes ocupan funciones de poder y autoridad en todo Afganistán tienen la responsabilidad de proteger las vidas humanas y la propiedad privada, así como el restablecimiento inmediato de la seguridad y el orden civil, y deben rendir cuentas por esto.

Debe permitirse que los ciudadanos afganos y de otras nacionalidades que desean salir del país puedan hacerlo; por consiguiente, los caminos, los aeropuertos y los cruces de frontera deben permanecer abiertos y es fundamental que se mantenga la calma.

El pueblo afgano merece vivir en un contexto de seguridad, protección y dignidad. Como comunidad internacional, estamos preparados para asistir a esas personas.