El complejo militaro-industrial estadounidense se opone a la campaña del presidente Joe Biden que ‎promueve la adquisición de productos «Made in USA». ‎

Ante el descalabro del Partido Demócrata en las elecciones locales, el presidente Biden ha ‎retomado el eslogan favorito de su predecesor, Donald Trump, llamando a privilegiar la compra de ‎productos estadounidenses. ‎

Sin embargo, los industriales temen que esa nueva campaña de la Casa Blanca obstaculice las ‎importaciones europeas hacia Estados Unidos… y acabe perjudicando las ventas de armas ‎estadounidenses. ‎

Alemania ya tiene un acuerdo con Estados Unidos sobre la reciprocidad en los volúmenes de ‎exportación e importación entre ambos países. ‎

La producción y exportación de armamento es la actividad más importante Estados Unidos y la que reporta más ganancias. ‎