El gobierno de la República Democrática Federal de Etiopía denuncia el anuncio que hizo ‎Estados Unidos el 12 de noviembre de 2021 imponiendo sanciones al Estado de Eritrea. Pensamos que Estados Unidos no ha tenido en cuenta varios hechos ‎importantes: ‎

‎1. El Frente de Liberación del Pueblo de Tigray (FLPT) disparó varios cohetes sobre un país soberano, ‎Eritrea, después de haber atacado, sin provocacion previa, el mando norte de la Fuerza de ‎Defensa Nacional etíope, el 3 de noviembre de 2020. ‎

‎2. Es un derecho soberano del Gobierno eritreo responder ante un peligro inminente para su ‎integridad territorial y su seguridad. ‎

‎3. El Gobierno etíope nunca protestó ante la comunidad internacional por la presencia inicial en ‎su suelo de fuerzas eritreas que defendían su integridad territorial. La presentación de ese tipo de ‎protesta es una prerrogativa del Gobierno etíope y de ningún otro país. ‎

‎4. El Gobierno eritreo evacuó sus fuerzas militares de Etiopía como resultado de la declaración de ‎alto al fuego humanitaria y unilateral emitida por el Gobierno etíope a finales de junio de 2021. ‎

‎5. El Gobierno etíope no piensa que el Estado eritreo sea un obstáculo para una paz duradera ‎en Etiopía. La amenaza verdadera y actual contra la paz en Etiopía y en la región del Cuerno de ‎África reside en la beligerancia y la agresividad constantes del FLPT. Reafirmamos que la reticencia ‎de la comunidad internacional en cuanto a condenar firmemente el papel desestabilizador del ‎FLPT ha estimulado a ese grupo terrorista. ‎

Si el objetivo de las sanciones es obligar las partes a cesar sus acciones desestabilizadoras, ‎el Gobierno etíope está firmemente convencido de que el verdadero blanco de las sanciones y de ‎futuras acciones más severas de parte del gobierno de Estados Unidos y de la comunidad ‎internacional tendría que ser el FLPT. ‎

Rogamos, por consiguiente, al gobierno de Estados Unidos que anule su decisión de imponer ‎sanciones al Estado de Eritrea y que adopte medidas contra la verdadera causa profunda de los ‎actuales desafíos en Etiopía: el FLPT. ‎