La fiscalía de la ciudad alemana de Hanover inició un procedimiento judicial contra el ex canciller ‎alemán Gerhard Schroder atribuyéndole «crímenes contra la humanidad». ‎

En 2003, Gerhard Schroder –como canciller de Alemania– y el ahora fallecido presidente francés ‎Jacques Chirac entraron en conflicto con Washington al oponerse frontalmente, en la ONU, a la ‎agresión de Estados Unidos contra Irak. Ambos dirigentes europeos incluso fueron amenazados ‎públicamente por el estratega estadounidense Edward Luttwak, quien gozaba de gran influencia ‎en la administración de George Bush hijo. ‎

Gerhard Schroder preside actualmente el consejo de administración del gigante ruso de la energía ‎Rosneft. También preside el comité de accionistas de la empresa Nord Stream AG. ‎

Según la fiscalía de Hanover esas funciones convierten al ex canciller alemán Gerhard Schroder ‎en responsable de los presuntos crímenes contra la humanidad que las fuerzas armadas rusas estarían ‎cometiendo en Ucrania. ‎

Estas acusaciones contra Schroder son un claro mensaje a toda la clase política alemana sobre la ‎actitud que tiene que adoptar hacia la política de Estados Unidos contra Rusia. ‎

A raíz del conflicto ucraniano, el nuevo canciller alemán, Olaf Scholtz, decidió –por ‎presiones de Washington– bloquear la puesta en marcha del nuevo gasoducto ruso ‎‎Nord Stream, que debía incrementar sustancialmente el aprovisionamiento de gas ruso a la Unión Europea. ‎Scholtz decidió igualmente que Alemania pondrá fin a la adquisición de gas ruso.‎