El presidente del parlamento de Israel, Mickey Levy, descartó la petición del presidente ucraniano, ‎Volodimir Zelenski, quien había solicitado dirigirse a los diputados israelíes por videoconferencia. ‎

En su respuesta a Zelensky, el presidente del parlamento israelí alegó la ausencia de numerosos ‎diputados y le propuso una reunión privada a través de Zoom. ‎

Por su parte, el primer ministro israelí, Naftali Bennett, telefoneó al presidente Zelenski y ‎le aconsejó que acepte las condiciones planteadas por Rusia, principalmente la destrucción de los ‎monumentos erigidos en Ucrania que glorifican a colaboradores nazis como Stepan Bandera ‎‎(1909-1959) y poner tras las rejas a los neonazis integrados al ejército ucraniano. ‎