Los expertos del Departamento de Defensa de Estados Unidos ponen en duda la veracidad de las ‎declaraciones del estado mayor ruso, que anunció haber utilizado misiles tácticos hipersónicos ‎para destruir una base militar ucraniana. ‎

Estados Unidos está todavía muy lejos de disponer de misiles hipersónicos –capaces de alcanzar ‎velocidades superiores a Mach 5, o sea más de 5 veces la velocidad del sonido– y el Pentágono ‎estima que no es posible que Rusia ya tenga ese tipo de armamento. ‎

No se trata de una cuestión secundaria. Si Rusia dispone de misiles hipersónicos operativos, eso ‎significa que las fuerzas armadas rusas pueden alcanzar cualquier blanco en cualquier lugar del ‎mundo sin que nadie sea capaz de impedirlo y esos misiles son capaces de transportar tanto ‎cargas convencionales como cargas nucleares. ‎

En otras palabras, si Rusia dispone realmente de armamento hipersónico eso quiere decir que el ‎arsenal de las fuerzas armadas de Estados Unidos ya es obsoleto. ‎

El presidente Vladimir Putin anunció en 2018 –hace 4 años– que los científicos rusos ya habían ‎logrado dominar esa tecnología y que Rusia estaba experimentando con misiles hipersónicos ‎tácticos y también estratégicos [1]. ‎

Por su parte, el Pentágono no creyó necesario invertir en ese tipo de armamento y ‎Estados Unidos apostó, al contrario, por el desarrollo de su «escudo antimisiles», inútil ante los ‎misiles hipersónicos. ‎

[1«El nuevo arsenal nuclear ruso restaura la bipolaridad del mundo», por Thierry Meyssan, Red Voltaire, 6 de marzo de 2018.