Los cadáveres de la localidad ucraniana de Bucha que han sido sometidos a autopsias por expertos ‎internacionales portan todos las mismas heridas causadas por pequeñas flechas provenientes de ‎un tipo de munición antipersonal ampliamente utilizada durante la Primera Guerra Mundial y, ‎posteriormente, en la guerra de Vietnam. ‎

La artillería de las Fuerzas Armadas Ucranianas también utilizó ese tipo de munición en 2014 ‎contra las Repúblicas Populares autoproclamadas en el Donbass. ‎

El informe que menciona ese descubrimiento contradice la versión del gobierno ucraniano, según ‎el cual los civiles muertos en Bucha habrían caído bajo el fuego de armas automáticas de los ‎militares rusos. ‎