ONG
Amnesty International
¿Derecho de injerencia o derecho internacional?
Respuesta a la izquierda anti-antiguerrapor
Jean Bricmont

Incapaz de concretar su necesaria reconstrucción ideológica después de la desaparición del «hermano mayor» soviético, la izquierda europea se pierde hoy en día en luchas sobre los valores e instituciones de la sociedad ya existente, en el plano interno, y a favor del intervencionismo humanitario, en materia de política exterior. Hundida de lleno en la incoherencia, esa izquierda está llamando al imperialismo estadounidense a «garantizar» la protección de los pueblos. Pero, ¿cómo se puede pretender proteger a los demás cuando uno mismo ha renunciado a su propia libertad?
Los humanitarios que justifican la guerra
El papel de Amnistía Internacional en la guerra contra Siria por
Mikel Itulain

El gran desafío de todas estas asociaciones humanitarias catalogadas bajo la denominación de ONGs — es decir Organizaciones No Gubernamentales— es la de lograr tener su propia autonomía económica y financiera que las blinde de guardar una independencia objetiva y soberana al momento de posicionarse como mediador o ente auxiliador en un conflicto social, en una guerra, en una catástrofe natural. Pero generalmente ninguna cuenta con esa independencia o autonomía financiera. Las ONGs son hoy en día grandes estructuras, con cientos de empleados, locales, y todo esto tiene un precio —a pesar de los benévolos que trabajan — y sólo pueden existir gracias a la ayuda financiera indispensable de ciertos poderes estatales o empresariales que han comprendido la gran utilidad de controlar o dirigir de cierta manera estas herramientas humanitarias, muchas veces (...)

Uno de los principales aliados de Estados Unidos en el Cuerno de África, Etiopía, lleva al extremo una de las leyes impulsadas por Washington en todo el mundo: la Proclama Antiterrorista. Ahora que mediante juicios sumarios el país africano ha encerrado a periodistas, luchadores sociales y políticos de oposición y ha provocado la condena mundial, el gobierno de Obama le pide que reconsidere

¿Se debe considerar como «prisioneros de opinión» a individuos que han sido condenados porque trabajaban para desestabilizar el país y pagados para ello por una potencia extranjera? A toda evidencia esto no es posible. Sin embargo la famosa organización Amnesty International admite que los agentes cubanos de los EEUU encargados de sabotear el estado cubano socialista son «prisioneros de opinión». El investigador francés Salim Lamrani se interroga sobre esta extraña concepción de AI cuando se sabe que legalmente cualquier país tiene el derecho de protegerse de las injerencias extranjeras.

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