Colonos israelíes de Cisjordania incendiaron cultivos y casas de pobladores palestinos, apedrearon automóviles y saquearon tiendas de comerciantes palestinos a lo largo de la carretera 60, el 19 y el 20 de junio.

Dos palestinos miembros del Hamas atacaron después a colonos israelíes en una gasolinera en un incidente que dejó 4 muertos y 4 heridos. Un israelí mató a uno de los atacantes y el otro fue abatido horas después por el ejército de Israel.

El 21 de junio, al menos 400 colonos israelíes atacaron la localidad palestina de Turmus Aya, donde quemaron una treintena de casas y alrededor de 60 vehículos.

Fue precisamente en la carretera 60, donde colonos israelíes destruyeron la localidad palestina de Huwara, el 26 febrero, bajo la mirada impasible del ejército de Israel. Los colonos israelíes perpetraron aquel pogromo antipalestino estimulados por las declaraciones incendiarias del ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, y del ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben- Gvir, ambos partidarios declarados de la supremacía judía.

El ataque de los colonos israelíes contra la población palestina de Huwara suscitó una dura advertencia de Washington al gobierno israelí de coalición conformado alrededor de Benyamin Netanyahu. En aquel momento, el gobierno israelí se comprometió a evitar nuevos incidentes como los que acaban de tener lugar.