Hoy nuestra nación recuerda. recordamos un día triste y terrible, el 11 de septiembre de 2001. Recordamos las vidas perdidas. Recordamos los actos heroicos. Recordamos la compasión y la decencia de nuestros conciudadanos ese día terrible.

Hoy también es un día de oración. Rezamos por los esposos y las esposas, y las mamás y los papás, y los hijos y las hijas y los seres queridos de aquellos que aún se afligen y sufren. Pedimos fuerza y sabiduría. Le damos gracias a Dios por las muchas bendiciones de esta nación y le pedimos su bendición para aquellos que sufren particularmente hoy.

Gracias.