Por primera vez, luego del trauma del paro petrolero, Petróleos de Venezuela presentó ante una serie de empresarios nacionales y extranjeros su nuevo plan de negocios sexenal 2004-2009.

Y en esta oportunidad, además de la gigantesca cantidad de recursos que este programa prevé serán inyectados en el sector -aproximadamente 100 millardos de dólares- también llaman la atención dos elementos adicionales, la intención de concretar un salto cuantitativo en lo que respecta a la capacidad de producción de hidrocarburos y la oferta real en si misma y el énfasis que se le da a la necesidad de volcar la mirada hacia adentro, hacia el país.

La orientación estratégica de este plan se sostiene sobre la base de lineamientos tales como la mejora de la base de recursos de hidrocarburo, la valorización de la cesta de crudos y productos de exportaciòn, el impulso del desarrollo endógeno nacional, la máxima participación del sector privado y la formación de capital nacional, la industrialización de los hidrocarburos en el país, el respeto a las leyes del sector y el cumplimiento de las obligaciones para con el Fisco Nacional y el fortalecimiento de la Organización de Países Exportadores de Petróleo.

El mencionado documento parte de premisas económicas generales. Por ejemplo, el tipo de cambio se fija en 2821 bolívares por dólar para el 2009, el promedio de precios del crudo venezolano se ubica en 22 dólares por barril para ese mismo período, mientras que a la cotización del referencial West Texas Intermediate se la sitúa en 27 dólares por barril.

En tanto, se sostiene que la producción petrolera se incrementará de los 3,4 millones de barriles diarios, a los que se afirma se llegará a finales del 2004, hasta alcanzar los 4,6 millones de barriles diarios dentro se seis años. Aquí debe destacarse que 75% del volumen a extraer dependerá del esfuerzo exclusivo que se espera realice la compañía nacional.

Y en lo que respecta a la capacidad de oferta de crudo, se sostiene que la misma pasará de 3,75 millones de barriles por día a 5,04 millones de barriles diarios durante el lapso arriba mencionado.

Los desembolsos de los ya citados 100 millardos de dólares ya citados suman desde un mínimo de 16 millardos de dólares anuales hasta en máximo de 19 millardos de dólares. Los periodos de mayor inversión serían los comprendidos entre el 2005 y el 2007.

Y de la cantidad global a invertir se supone que el Estado venezolano a través de Pdvsa aporte entre 30% y 35%. Mientras que el resto sería colocado sobre la mesa por las grades transnacionales del sector, algunas empresas nacionales y finalmente por la banca internacional mediante préstamos directos o gracias al mecanismo de oferta de bonos.

Alfredo Pineda, gerente de planificación de Pdvsa, máximo responsable de la elaboración del plan de negocios descrito en esta nota, ha dicho que más de 50% de los fondos a comprometer en este programa estarán destinados al desarrollo de tareas de exploración y producción de petróleo y gas natural tanto en tierra firme como costa afuera.

En lo que respecta a esas actividades, que en la industria petrolera son denominadas como aguas arriba, en el 2004 se realizarán inversiones cercanas a los 5 millardos de dólares tanto en el oriente como en el occidente del país. En tanto, en lo que se llama aguas arriba (específicamente en refinación de crudo y procesamiento de gas natural) se estiman inversiones por aproximadamente 1,8 millardos de dólares.

Este y oeste

En el caso de occidente este año se pretende iniciar una serie de proyectos que suman 4,40 millardos de dólares. Entre los de mayor importancia figura el desarrollo de nuevos campos como el Urdaneta y gigante Tomoporo-Ceuta Sur, zonas de las cuales se busca agregar unos 400.000 barriles diarios de crudos liviano, mediano y pesado a la producción nacional.

En esa lista se destaca también la modernización y ampliación de la planta de compresión de gas Tía Juana I (construida en la década de los 30 del siglo pasado), para lo que han sido presupuestados 2,77 millardos de dólares. Para el arranque y desarrollo del futuro Complejo Criogénico de Occidente -proyecto con características similares al Centro Industrial de Jose, en el estado Anzoátegui- se han asignado 1,63 millardos de dólares.

Al proyecto de Interconexión Centro Occidente, mediante el cual el gas proveniente de oriente podrá ayudar a solucionar el desbalance nacional de este recurso que sufre el país, se le otorgarán 470 millones de dólares.

Y finalmente, para dentro de algunos meses está previsto llevar a cabo una ronda de licitación de siete áreas ubicadas costa afuera, cuatro en el Golfo de Venezuela y tres al norte del estado Falcón, bloques destinados a la exploración y desarrollo de reservas de gas natural, estrategia que se ha comentado presenta características bastante parecidas a la que se aplicó en la Plataforma Deltana.

Por su parte, entre los proyectos que se ejecutarán en el oriente de Venezuela destacan como más importantes tanto por las cantidades de divisas comprometidas como por sus consecuencias:
 el Mariscal Sucre, que representa 2,7 millardos de dólares, que tiene como objetivo producir unas 3,8 toneladas de pies cúbicos de gas al año y cuyo acuerdo definitivo de inversiones estaría a punto de firmarse;
 el Complejo Industrial Gran Mariscal de Ayacucho, a desarrollar en la Península de Paria, cerca de Guiria, estado Sucre, parque industrial que será alimentado con gas natural proveniente del ya nombrado Mariscal Sucre y de los bloques de la Plataforma Deltana;
 la Plataforma Deltana, zona de la que se espera una producción de gas natural no asociado de aproximadamente 1 millardos de toneladas por año,
 los trabajos de exploración con la finalidad de aumentar las reservas de crudos en los campos Tácata, Chaguaramal y Cotoperí.
 Y la posible entrega de áreas de desarrollo de crudo pesado y extrapesado en la Faja Petrolífera del Orinoco a empresas transnacionales luego de la realización de una ronda de licitaciones en las que podrán participar también las empresas que con Pdvsa conforman las operadoras que tiene a su cargo los asociaciones estratégicas Cerro Negro, Ameriven, Sincrudos de Oriente y Petrozuata.

Caracas, Alia2