En plena guerra, los gobiernos occidentales, y más específicamente el gobierno estadounidense, acuden a los diferentes medios de comunicación para apuntalar sus posiciones. Tal maniobra tiene una influencia psicológica considerable sobre las partes contrincantes. El vínculo entre ambas guerras, la armada y la mediática, se remonta a hace varios siglos. Es fruto del pensamiento humano, y su objetivo era desmotivar al enemigo y obligarlo a aceptar la derrota.
Así, en el pasado, los ejércitos, antes de atacar, enviaban un pequeño número de soldados disfrazados de mercaderes, artesanos o médicos para hacer propaganda en las ciudades que constituirían el blanco de los ataques. Estos soldados describían la grandeza del presunto atacante e incitaban a los soldados a no resistir, dado que no les serviría de nada.
El desarrollo tecnológico actual ha permitido a los medios convertirse en un elemento indispensable antes, durante y después de toda guerra. Ello ha estimulado igualmente la intoxicación mediática, preconizada por las fuerzas ocupantes, para imponer sus puntos de vista y convicciones. Por otra parte, algunos actores mediáticos piensan que la verdad, en la actualidad, es la primera víctima de la guerra, sobre todo después que Occidente adoptó la teoría que vincula al ejército y a los medios de comunicación.
Estados Unidos no se limita a la estrategia militar, sino que utiliza la guerra psicológica, la propaganda y los medios. El mejor ejemplo es el caso iraquí, en función del cual Estados Unidos movilizó todo tipo de medios de comunicación que sirvieran para justificar su ataque.
En el mundo árabe, la administración Bush puso en funcionamiento un sistema retransmisor «arabizado» como la cadena vía satélite «Al-hurra» y la estación de radio «Sawa». El objetivo de tal dispositivo es mejorar su imagen y propagar su modelo cultural y social. En vez de «Al-hurra», que significa «la libre», la mencionada cadena hubiera podido llamarse «la cadena de la ocupación».
Estados Unidos y el sionismo internacional se han convertido, gracias a su dispositivo mediático, en una parte de nuestra realidad política y cultural. Buscan una nueva justificación para la ocupación estadounidense en el mundo árabe-musulmán. Así, se hace indispensable que nuestros medios lleven a cabo reformas considerables para poder servir las causas de nuestra nación árabe.

Fuente
Rezgar
Primer diario electrónico e independiente de la izquierda laica en el mundo árabe.

«الإعلام ودوره في الحرب وفي السياسة, por Faissal Al-azel, Rezgar , 31 de enero de 2006.