1- Ya se sabe que los golpistas de Kiev, simples politiqueros de pacotilla, responden directamente a las órdenes que reciben de Estados Unidos. No abordaré aquí las circunstancias de ese golpe de Estado, ya ampliamente descritas, ni tampoco las que rodearon la reunificación entre Crimea y Rusia, sino la extraña «guerra civil» de la semana pasada, que tuve la ocasión de seguir de cerca.

A los soldados ucranianos se les dijo que iban a enfrentarse a esto:

Y lo que se encontraron fue esto:

Un hombre detiene un vehículo blindado interponiéndose en su camino mientras que una “babouchka” [en ruso “abuelita”] regaña a los soldados.

2- La operación «antiterrorista» ordenada por Kiev y emprendida principalmente entre el martes 15 y el miércoles 16 de abril de 2014, operación que consistió en el envío de jóvenes reclutas a bordo de blindados de los años 1950 y bajo las órdenes del obtuso general Vasily Krutov, supuestamente para enfrentar a la élite de las tropas rusas –los famosos «Spetsnaz»–, resultó una ridícula farsa. Se les dijo a los soldados que fuerzas especiales rusas se habían infiltrado en la región de Dombass para preparar un desembarco ruso de tropas aerotransportadas en el pequeño aeródromo de Kramatorsk. Este aeródromo, fuera de servicio, estaba custodiado en realidad por 8 plácidos habitantes de la cercana localidad de Slaviansk.

La población zarandea al general Vasily Krutov.

3- De entrada, 4 de estos 8 habitantes de Slaviansk fueron abatidos de inmediato en circunstancias aún desconocidas, probablemente por una avanzada de francotiradores.

4- Hombres, mujeres y niños acudieron entonces al lugar para entrar en contacto con los jóvenes soldados, quienes fueron copiosamente regañados por las mujeres mientras que los pobladores zarandeaban un poco al «experto» general. Los francotiradores que inicialmente habían abatido 4 personas habrían podido entonces reiterar su fechoría, pero habían desaparecido o fueron oportunamente neutralizados.

Una mujer discute con un oficial.

5- ¿Qué esperaban en Washington? Probablemente un baño de sangre que diese inicio a una guerra civil. ¿Cómo podemos llegar a esa conclusión? Si el verdadero objetivo de la «operación antiterrorista» de Kiev hubiese sido impedir un desembarco de fuerzas aerotransportadas rusas o neutralizar una fuerza «spetsnaz» [1], es evidente que habrían tenido que enviar algo más que esta tropa de reclutas con blindados viejos. Por consiguiente, los reclutas y su «avezado» general fueron enviados al desastre, como carne de cañón.

6- La operación resultó un ridículo fiasco en circunstancias dignas de una comedia. Pudo verse una «babouchka» [«Abuelita» en ruso.] parando un blindado ucraniano, mujeres y niños merendando en la hierba con jóvenes reclutas que lloraban a moco tendido mientras que aviones de guerra y helicópteros de ataque sobrevolaban la bucólica escena… ¿en espera de qué?

En todo caso, es justo saludar aquí la actitud de los soldados ucranianos que se negaron a hacer el papel de simples instrumentos en esta triste aventura.

Almuerzo campestre con la población que brindó de comer a los soldados. Los “estrategas” de Kiev no tenían previsto alimentar a los hombres enviados a una operación que debía resultar catastrófica para estos últimos.

7- Pregunta: ¿Será que los jefes de la CIA son idiotas? ¿O se trató más bien de una maniobra desesperada? Las fuerzas especiales ucranianas no aceptaron la invitación a desatar una guerra civil. Tampoco la aceptaron las tropas de élite enviadas por vía aérea desde Dnipropetrovsk.

8- En el encuentro de Ginebra, Estados Unidos aceptó todas las demandas de Rusia, sin excepción.

Por supuesto, todo el mundo sabe que Washington no respetará ni una palabra de lo acordado allí. Estados Unidos prosigue su política de seudo «sanciones» y su inútil gesticulación militar, a través de sus títeres locales.

9- Esta misma noche [del 19 al 20 de abril de 2014], a pesar de lo acordado en Ginebra, un comando fuertemente armado, cuyos miembros dejan convenientemente en el lugar una insignia de «Pravy Sector» (Sector de Derecha), ametralló un grupo de ciudadanos de Slaviansk armados únicamente de palos, matando a 4 de ellos. Dos de los atacantes fueron abatidos posteriormente por la milicia de Dombas, que acudió en ayuda de los agredidos, y un tercero fue capturado.

Restos calcinados de los vehículos del comando que atacó durante la noche un punto de control de la milicia de la región de Dombas.

Conclusión: No hay nada realmente creíble en toda esta historia, a no ser que Estados Unidos quiere absolutamente –y a pesar de todo lo acordado– desatar una sangrienta guerra civil, como en Yugoslavia, y provocar una intervención rusa que genere en esa parte de Europa un grave conflicto armado, del que nadie sabe adónde puede ir a parar.

Estados Unidos parece hallarse bajo la dirección de una banda de locos irresponsables, como los del film de Kubrick Dr. Strangelove. Pero Stanley Kubrick nos muestra en su película un presidente estadounidense amante de la paz.

Lo que no se ve en el flim de Kubrick es que Estados Unidos no está bajo la dirección de un presidente sino a las órdenes de un Estado profundo [2], perfectamente descrito por Peter Dale Scott, y que ese Estado profundo parece decidido a imponernos otra guerra mundial.

Por suerte, Rusia tiene como presidente un hombre responsable que sabe evitar las trampas tendidas por individuos a quienes conoce a la perfección.

Habrá que esperar las próximas intrigas estadounidenses porque, en mi opinión, esto es sólo un comienzo.

[1«Spetsnaz» es la abreviatura rusa utilizada para referirse a las «Tropas de Destino Especial», designación de las fuerzas especiales de la Federación Rusa.