La conferencia de prensa de Slim se presenta, sin embargo, apenas un mes después de que el fundador del Grupo Carso se reunió en Miami con Donald Trump. Los asuntos que se trataron en aquella reunión no se revelaron en su momento y el encuentro de Slim con la prensa nacional e internacional se convirtió en el mejor escenario para preguntarle. ¿Por qué se reunió con Trump? ¿De qué hablaron?

“Fue una reunión social”. “No fue una reunión una a uno sino tres a tres”. Son algunas de las evasivas respuestas que uno de los hombres más ricos de México aceptó regalar a la prensa al tiempo que desviaba en todo momento la exposición a su mensaje principal: la era Trump es una oportunidad de reconvertir y fortalecer la economía interna del país.

Una hoja llena de anotaciones de su puño y letra sirvieron de apuntador a un hombre que, nos guste o no, está más allá del bien y del mal y al cual –sin embargo– le molesta perder 300 millones de pesos al mes porque America Móvil es un jugador dominante que debe permitir a sus competidores conectarse a su red de telecomunicaciones sin cobro alguno.

Asistí a la convocatoria de Slim en su búnker de avenida Palmas en la Ciudad de México, igual que otros 100 reporteros de medios de comunicación. Sólo una veintena (yo no, por supuesto) logró una pregunta directa a Slim quien probó en todo momento su vena cómica, su bueno humor. Lo vimos sano, optimista y –sobre sus hombros– con la mirada tierna de sus hijos flanqueándolo en todo momento. A cada broma de Slim, sus hijos y nietos lo miraban como a un chico travieso. Una y otra vez, Slim retomaba citas del libro de Donald Trump recomendando su lectura y, en tono de broma, aseguró que no estaba haciendo publicidad para que lo compraran en las tiendas Sanborns.

Slim recordó a “Pepe Iturriaga”, a José Ezequiel Iturriaga Sauco, su gran amigo, el abogado, el sociólogo y hasta el periodista, quien llegó a ser director general adjunto de Nacional Financiera. Slim compartió con Iturriaga los grandes sueños para México, los del desarrollo interno y, por supuesto, aquellos que salvaron muchos edificios del centro histórico de la Ciudad de México. Recordó la prensa algunas de las reflexiones que realizó con Iturriaga sobre el futuro de México.

Inédito fue este encuentro con la prensa durante el cual Slim puso en tela de juicio la gestión del Banco de México al frente de la política monetaria. Nunca antes se habían tenido tantas reservas monetarias (más de 174 mil millones de pesos) y no se habían usado para defender al peso. Inconcebible para Carlos Slim quien tiene más de la mitad de su fortuna fuera del país, documentada en dólares. Sin embargo, el presidente del Grupo Carso aseguró que la posición del peso frente al dólar era totalmente ficticia, irreal. Y Slim lo logró: el jueves que decidió hablar ante la prensa sobre los ataques de Donald Trump, el tipo de cambio tocó niveles menos a los 21 pesos. Este lunes confirmaremos que el tipo de cambio ha estado sujeto a una insana especulación inspirada en los tuits de Donald Trump quien sólo lleva unos días en la Presidencia de Estados Unidos pero ya vive su primera crisis después de que el Poder Judicial confrontó su decisión de impedir el ingreso a migrantes de origen musulmán.

Slim habló claro de un tema que le preocupa: el tipo de cambio pero también se refirió al mercado interno, a la capacidad de los trabajadores migratorios, a la inversión extranjera, al “no” para el boicot de productos extranjeros pero el severo cuestionamiento a las autoridades del Instituto Federal de Telecomunicaciones que lo obligan a abrir su infraestructura a otros jugadores. En fin, Slim habló de todo y para todos. Pero eso sí, no le interesa la Presidencia de la República. De los avances de Andrés Manuel López Obrador rumbo a 2018 dijo: “Si no es una carrera de caballos”. Así, evasivo, Slim contestó lo que quiso.

Respecto a sus negocios en Estados Unidos tuvo que aceptar que en un par de meses su gasoducto entrará en operación. Aquí es donde comenzó a tomar sentido su conferencia: sus negocios en Estados Unidos, la debilidad del peso frente al dólar y la inestabilidad de una economía que sigue dándole muchos dividendos. Trump no es Terminator, es Negociator. Risas en la sala mientras todo México muere de pánico ante la persecución del nuevo Presidente de Estados Unidos.

Lo más importante, dijo, era manifestar “su contento por la unidad de México”, unidad que no se veía desde el terremoto de 1985.
Proméxico, la joya de la corona

Quizás exagero pero en un momento como el que vive México, la promoción de los productos mexicanos resulta fundamental. Proméxico, la agencia para la promoción de inversiones, concentra casi 20 de sus oficinas en Estados Unidos. Esta concentración en el mercado estadunidense resulta ampliamente justificable en el marco del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Ahora, se apruebe o no la desaparición del TLCAN, como lo conocemos ahora, Proméxico tendrá que revisar sus estrategias de Promoción. En esta etapa, Paulo Carreño, exsubsecretario de Relaciones Exteriores, tendría el reto de diversificar las relaciones de negocios de México con Asia, África, centro, Sudamérica y El Caribe.

El exdirector de Proméxico, Francisco N González, avanzó de manera importante en esta encomienda; sin embargo, hasta hace unos meses la relación de negocios con Estados Unidos era la prioridad. Ahora, al frente de la dirección general de Bancomext, Francisco N González, seguirá impulsando la presencia de empresas y productos mexicanos. Desde hace varios años que Proméxico y Bancomext no trabajaban de manera coordinada. Usted recuerda que Proméxico surge de la desconcentración de actividades, funcionarios y, por supuesto, de Proméxico. En ese momento, Bancomext tuvo que dejar ir a gente clave de su estructura y oficinas en el exterior. Es famoso el caso de los representantes de Bancomext en China que, durante el gobierno de Felipe Calderón, tuvieron que dejar su sitió a jóvenes inexpertos. Así sucede. En fin.

Lo importante es que bajo la gestión de Carreño y González los empresarios mexicanos interesados en exportar sus productos tendrían que encontrar apoyo en sus proyectos de expansión internacional. Proméxico también tiene el reto de atraer inversiones de sector estratégicos y de sostener círculos virtuosos como el que se logró con la industria automotriz o en la aeronáutica.

Después de muchos meses sin director general, Bancomext tiene recursos que deberá dirigir a empresas que generen empleo en el mercado interno y contribuyan a compensar el impacto de la era Trump.
Nafin apuesta por los jóvenes

Y a propósito de políticas públicas, resulta que en Nafin que encabeza Jacques Rogosinsky llevó a este banco de desarrollo la ejecución políticas públicas para impulsar la creación de nuevas empresas. ¿Por qué un banco de desarrollo otorga créditos a jóvenes con riesgo de incrementar su cartera vencida?

La respuesta está en la escasa generación de empleos y los bajos sueldos que se otorga a los jóvenes. La buena noticia es que el crédito joven de Nafin sólo tiene una cartera vencida de 1 por ciento, lo que demuestra que la población de entre 18 y 35 años tiene gran potencial y responsabilidad. Lo mismo sucede con la población femenina que participa en el sector empresarial y en donde el 99 por ciento de las acreditadas paga sin falta sus financiamientos.

Con crédito joven, Nafin busca demostrar que los jóvenes pueden confiar en la banca; que son los financiamiento mal otorgados a través de tarjetas de crédito los que dañan de manera irreversible el expediente crediticio de la población de este segmento.

Crédito Joven y los préstamos para mujeres empresarias podrían representar en 2017 más de 5 mil millones de pesos en la cartera de Nafin con tasas anuales muy atractivas. En el caso del financiamiento para las mujeres, la tasa fija es de entre 9 y 9.95 por ciento debido al bajo nivel de riesgo e incumplimiento de pago.