Del día 23 al 30 de agosto, miles de familias pobres y sin vivienda de todas partes de los Estados Unidos, lideradas por la Campaña de los Pobres por los Derechos Humanos y Económicos, el KWRU y su dirigente social Cheri Honkala, construirán un campamento llamado BUSHVILLE, en el área de la ciudad de Nueva York.

Marcharemos porque la pobreza, el hambre, el desempleo y la falta de vivienda han aumentado en todas partes del país, porque los pobres hemos sido abandonados por los líderes políticos de ambos partidos tradicionales. Porque no podemos quedarnos callados, porque no podemos permitir que se nos desaparezca de la vista del público y de los debates políticos y mediáticos, mientras sufren nuestras familias.

Hacemos una llamada urgente a la comunidad internacional a que organicen y resuelvan el envío emergente de Observadores de los derechos humanos a Bushville y a la Marcha por Nuestras Vidas: Alto a La Guerra en casa.

Ahora más que nunca necesitamos que los ojos de la comunidad internacional de derechos humanos, los organismos internacionales, nacionales y regionales de defensa de los derechos humanos, enfoquen su mirada de preocupación en los Estados Unidos, para ayudarnos a garantizar que podamos emitir a la nación y al mundo, el silencioso sufrimiento de los más pobres en el país más rico del mundo.

Mientras que el gobierno de los EEUU impone la guerra y violaciones de los derechos humanos en contra de tanta gente alrededor del mundo, a la vez comete violaciones graves en contra de los derechos humanos de su propia gente, al implementar políticas que empobrecen y matan a gente alrededor de los EEUU. Esas políticas han sido armas masivas de destrucción, que han provocado hambre, desempleo, falta de vivienda, de salud, de educación, de agua y de calefacción.

A la vez, el gobierno reprime los esfuerzos de los pobres y de otros sectores de la sociedad, que intentamos hablar sobre la situación de los derechos humanos en los EEUU. Las silenciosas armas de destrucción masiva son estas políticas que han dejado a millones de personas sin vivienda, sin agua, sin comida, sin calefacción, sin salud y sin educación en nuestro país y alrededor del mundo.

La Campaña de los Pobres por los Derechos Humanos y Económicos está organizando Bushville y la Marcha por Nuestras Vidas para visibilizar el sufrimiento y la lucha de los pobres de los Estados Unidos. Nuestras vidas dependen de que podamos hablar y contar nuestra historia al mundo entero, pero cuando alzamos nuestras voces, se nos encarcela, amenaza, se ataca nuestras familias y el gobierno advierte que nos quitaría a nuestros niños. Nuestras familias y nuestras vidas están en riesgo, pero lo único que nos queda son nuestras voces. En esta coyuntura peligrosa en la historia de los EEUU y del mundo, lucharemos, no callaremos.

Hacemos este pedido urgente a la comunidad internacional a que no nos dejen solas, a que nos acompañen.

Durante el Bushville de una semana, estaremos exponiendo las ARMAS DE DESTRUCCION MASIVA que existen en nuestro país y que está usando nuestro gobierno para violar los derechos humanos en este país y alrededor del mundo. Desde Bushville llevaremos a los observadores internacionales en una "Gira por la realidad de los EEUU" en la que expondremos esas ARMAS DE DESTRUCCION MASIVA para que la comunidad internacional los documente y vigile.

Favor mirar www.kwru.org <http://www.kwru.org> o comunicarse con Jen Cox a kwru@kwru.org , para mayor información sobre cómo hacerse observador internacional durante la Marcha por Nuestras Vidas este agosto en la ciudad de Nueva York en los Estados Unidos.

KWRU

Kensigton Welfare Rigths Union

Posdata de la PIDHDD Continental-PIDHDD Ecuador y la APDH:

Nos sumamos a dicho llamamiento y pedimos a todas nuestras hermandades y amistades en América Latina, Europa y los propios EEUU, apoyar este esfuerzo, escribir una carta, marchar con nuestras hermanas Cheri, Jen y el KWRU. En el pasado, ellas lograron organizar la marcha más grande de pobres, después de la realizada por Martin Luther King.

Hoy nos permitimos informar que, en señal de acompañamiento solidario y comprometido con KWRU y Bushville, con el pueblo estadounidense pobre y por los derechos sociales y económicos de su gente, una delegación de la Plataforma Interamericana de Derechos Humanos, Democracia y Desarrollo, ha tomado la decisión de viajar a los EEUU y sumarse en calidad de Observadora en este esfuerzo. La decisión le fue anunciada por el Coordinador continental de la PIDHDD, Roy Pierre Toussaint y el Coordinador de la PIDHDD Ecuador, Alexis Ponce, a Cheri Honkala, dirigente del KWRU, en Quito, durante el Foro Social de las Américas al cual fue invitada.

La PIDHDD confirma la participación de ‘una numerosa delegación’, que se sumará a esta iniciativa de Observadores de la comunidad internacional de DDHH y acompañará la jornada del KWRU en la Marcha por Nuestras Vidas (Alto a la guerra en casa).

Fidel Narváez

Secretario Técnico de PIDHDD Ecuador

Anexo:

Nota de Prensa de Diario El Comercio de Ecuador a Cheri Honkala, líder del KWRU.

‘En Estados Unidos el sistema de salud pública es criminal’

Quisiera decir que me involucré en el movimiento de los sin techo en Estados Unidos porque vi una luz en mi vida, pero no es así. Lo hice por necesidad.

Me crié en una familia muy pobre. A mi madre la golpeaban diariamente y cinco niños lo veían todo; siempre teníamos que salir de donde dormíamos. En esa época no habían refugios para mujeres golpeadas por sus esposos ni para sus hijos.

Por eso pasé por diversos reformatorios en varias ciudades de los Estados Unidos. Antes de los 16 años, en 1979, estuve en nueve correccionales. Simplemente no había lugar para los niños sin techo en la ciudad.

Me convertí en una madre adolescente. Tuve que conocer lo que es sobrevivir a los 16 años con un bebé a cuestas. Vivía en Minessota, que es uno de los estados más fríos del país, donde la temperatura baja a menos de cero grados. Mi hogar era un pequeño auto.

Una noche que nevaba, junto con mi hijo, intentaba ingresar a un refugio o a una iglesia pero no pude.

Manejaba el vehículo sin destino y se desinfló la segunda llanta en medio del frío. Sabía que si me quedaba en mi hogar, que era el auto, ambos hubiéramos muerto congelados. En ese instante, al costado de la vía observé una casa que estaba abandonada y tenía calefacción.

Decidí que ni yo ni mi hijo moriríamos. Antes de ese día no había violado la ley. Abrí la puerta y me mudé a esa casa vacía con calefacción.

En los ochenta, luché porque yo y mi hijo tuviéramos un hogar y me encontré con otras mujeres en mi misma situación. Decidimos unirnos y a la semana de organizadas ocupamos decenas de casas abandonadas en Minessota.

La Policía me buscaba para arrestarme y un día me llevó a la cárcel. Pero mi hijo llamó a las otras personas sin techo, que ocuparon más viviendas hasta que se vieron obligados a liberarme.

Continué mi lucha por los sin techo. Pero hace tres años noté otro grave problema en Estados Unidos. Me desmaye durante una conferencia de prensa y no tenía seguro para atenderme en un hospital. Mi hijo, urgentemente, me llevó a una casa de salud.

Pero allí estaban más preocupados por saber quién iba a pagar la cuenta. Yo sangraba internamente. 
Si mi hijo no hubiera sido criado en un movimiento social o si no tuviera mi problema de actitud, no me hubieran atendido de emergencia.

Antes de ingresar me dijo que el mundo me necesita y que debo sobrevivir; estuve de acuerdo con él y sané.
El problema de la atención médica es lo que me ha causado más enojo. Más de 18 000 personas mueren cada año en mi país solo por no tener un seguro médico.

Por eso me ven en ruedas de prensa, ocupando casas o haciendo protestas frente a los hospitales. La situación es tan criminal en los hospitales de Estados Unidos que la gente puede morir frente a las salas de emergencia. En otros países la gente clama por un doctor.

Esto lo hago hace 20 años y mis arrestos por la Policía estadounidense suman más de 60. Sé que me hacen perder el tiempo cuando me apresan.

Hace pocas semanas terminé otro juicio, fui detenida por tratar de conseguir vivienda para las mujeres de la calle. Organizamos una protesta en una oficina y fui encerrada 

Es simple: en mi país tenemos más casas abandonadas que familias sin casa. Mi vida está dedicada a reclamar el derecho de la gente a tener una vivienda, un lugar seguro para vivir con sus hijos y poder criarlos sanamente.

Desde Filadelfia 

Una activista de 41 años Cheri Honkala nació en Minessota el 12 de enero de 1963. Ella es la organizadora nacional en los Estados Unidos de la Campaña de los Pobres por los Derechos Económicos. Trabaja en Filadelfia. 

Millares de personas sin techo Según la activista estadounidense, más de un millón de personas no tiene vivienda en Estados Unidos. Ellos están las calles de las grandes urbes.

En el foro social: Honkala es fundadora de ‘Kensigton Welfare Rigths Union’ que realiza protestas por los sin techo en varias ciudades de Estados Unidos. Participó en el Foro Social con la ponencia ’Los movimientos sociales bajo el Gobierno de Bush’.

El dato

Cheri Honkala prepara una masiva marcha de las personas pobres y sin techo en Nueva York. La protesta será el 30 de agosto.
 
Martes, 27 de Julio del 2004