La misma fuente indicó que las reservas de gas también aumentaron de 150 billones a 151,479 billones de pies cúbicos.

Actualmente Venezuela trabaja en la certificación de hidrocarburos pesados y extrapesados en la Faja Petrolífera del Orinoco y espera adicionar 236.000 millones de barriles, para convertir al país en la mayor reservas de petróleo del mundo.

Mediante esa iniciativa, Venezuela pretende demostrar la existencia de petróleo en la Faja del Orinoco, en lugar de bitumen como se pensaba anteriormente.

La nota de PDVSA explica que las reservas probadas de crudo y gas garantizan el suministro confiable a sus clientes y países hermanos para consolidar así la idea de la Alternativa Bolivariana para la América (ALBA).

Mediante el ALBA Venezuela propone un sistema regional de integración basado en la cooperación y no en el comercio, en contraposición con el proyecto de Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA) promovido por Estados Unidos.

Como parte del proyecto venezolano se comenzaron a integrar las empresas regionales Petroamérica, Petrocaribe, Petrosur y Petroandina, para hacer llegar recursos energéticos a otros países bajo los principios de solidaridad y complementación económica.

Como parte del proceso de confirmación PDVSA y la empresa rusa Lukoil Overseas Holding acordaron ayer integrar equipos técnicos para cuantificar los crudos pesados y extrapesados del Bloque Junín III en la Faja Petrolífera del Orinoco.

El director Interno de PDVSA, Eulogio del Pino, explicó que el acuerdo se incluye en el Plan Siembra Petrolera, que prevé la evaluación de siete bloques de la Faja Petrolífera del Orinoco junto con socios estratégicos.

Del Pino adelantó que los trabajos con Lukoil en un área de 640 kilómetros cuadrados, en el estado Anzoátegui, concluirán en un período de 18 meses.

El vicepresidente de Operaciones de Lukoil Overseas, Azat Shamsuarov, explicó que el primer grupo de trabajo ruso estará compuesto por especialistas de Geofísica y Petrofísica.