Lori Berenson

A propósito de la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, la cual nos ha sido oficialmente comunicada queremos expresar lo siguiente:

  1. Al tomar conocimiento del fallo de la CIDH, aun cuando el mismo nos ha sido desfavorable, lo recibimos con la misma dignidad y entereza con la que hasta ahora venimos afrontando nuestra injusta carcelería, y nos reafirmamos en que la mejor forma de mostrar respeto por la ciudadanía y el pueblo es acatando las disposiciones. Nos reservamos el derecho de, a través de los mecanismos correspondientes, hacer llegar a la Corte nuestras observaciones.
  2. Desde que nuestra demanda inició su tratamiento en el fuero internacional, y sobre todo ante lo inminente de su resolución, se inició una campaña orientada a crear la falsa idea de que un fallo favorable para nosotros significaría un peligro para la seguridad del país, pretendiendo convertir el tema del fallo de la corte ligado al tema de la violencia política, en el problema principal de nuestro país. Estas versiones apocalípticas no tenían ningún sustento y sin embargo se insistía en ellas generando un innecesario clima de pánico y zozobra en la población.
  3. Desde hace tiempo el problema principal de nuestro querido Perú no se encuentra ni en las cortes internacionales ni en las prisiones. Hay demandas desatendidas de la población que hacen que el problema hoy se llame hambre, desempleo, desatención de servicios de salud, etc.
  4. Las y los ciudadanos y principalmente las autoridades del país, tenemos el deber de cumplir los fallos y resoluciones judiciales. Si no estamos de acuerdo con una sentencia, utilizamos los mecanismos y procedimientos que la ley nos franquea. Por eso lamentamos que a propósito de este caso se haya promovido de manera pública no solo el desconocimiento de la autoridad de los jueces, si no además el no acatamiento de sentencias cuando estas sean nos desfavorables. El hecho es grave cuando estas actitudes provienen de quienes tienen la obligación de hacer cumplir las leyes y las sentencias.
  5. Asimismo, el fallo de la Corte no es una carta blanca al estado peruano pues entre otras cosas allí se resuelve que el estado peruano todavía tiene que adecuar la legislación interna a los estándares de la Convención Interamericana de Derechos Humanos, así como resolver el tema del penal de Yanamayo.
  6. Finalmente queremos expresar nuestro agradecimiento a todas las personas que nos han hecho llegar su solidaridad antes, durante y después de conocerse el fallo de la CIDH.